Ángela Jiménez y Eustaquia Jiménez son las ganadoras del “Premio al solidario anónimo”, en su decimosexta edición correspondiente al año 2015 convocado por la Facultad de Trabajo Social y la Plataforma de Voluntariado de la Región de Murcia.

Una historia sencilla y auténtica como la vida misma. Son dos mujeres (madre e hija) que desde hace años vienen desarrollando una importante y significativa actividad voluntaria desde el más estricto anonimato.

Ángela, la hija, es una persona con discapacidad intelectual que se dedica activamente, con el apoyo de la Asociación para la integración de Personas con Discapacidad Intelectual (CEOM), a labores de voluntariado en distintas entidades lo que ayuda a poner en valor y visibilizar a las Personas con Discapacidad Intelectual con sus potencialidades. Es la primera vez que una persona con discapacidad intelectual recibe el Premio Solidario Anónimo.