La oportuna coherencia de las palabras

Juan Tomás Frutos

 

Resolvamos todas las incógnitas que podamos en ese entorno más cercano. No vivamos en la duda, que nos hace débiles.

 

Busquemos el acomodo de la existencia en todas sus facetas, en lo que nos merece la pena si miramos con agrado y buena perspectiva.

Asumamos los logros como algo que tenemos que compartir desde el escenario más noble. Todos han de estar en su sitio, en el adecuado, donde podamos aprender de lo que nos regala el porvenir.

Asintamos cada vez que sea posible. Persigamos el lado amable de la vida, lo positivo, lo que nos puede adiestrar en la superación de los problemas. No simulemos que podemos cuando no sea así, y busquemos ayuda en los demás. Pueden ser un buen reflejo y un extraordinario apoyo.

Los pasos que damos nos perfilan, con su histórico, en lo que es y en lo que tiene más o menos sentido. Hagamos frente común para la superación de cualquier equívoco o cansancio. Las premisas de toda existencia están resumidas en la necesidad de buscar la máxima comunicación con hechos y con palabras, en oportuna coherencia de los unos y las otras.

La comunicación de un don espiritual

Juan Tomás Frutos

 

Eres la gran pasión de mi vida, mi vida misma gracias a los intercambios de preferencias y de procesos con los que nos animamos a caminar juntos. Debemos unirnos cada vez que sea posible.

 

Andemos el camino con las opciones que nos regala la existencia, dando los pasos que nos han de procurar los racimos de esa vid con la que calmaremos la sed y el hambre.

Urge la transformación de las almas para cambiar también cuanto somos, lo que pensamos, lo que hacemos. Todo tiene sentido si dedicamos tiempo a encontrarlo y a compartirlo desde el conocimiento. Conciliemos.

Las divertidas acciones nos regalan felicidad. Actuemos. No nos alentemos al desaire, sino a la mejoría convertida en relevo de perdones y de penitencias. Nos hemos de convencer de las posibilidades que tenemos.

Seamos astutos a tiempo completo y busquemos la plenitud en los eriales que nos rodean. Festejemos lo que tenemos con labores de esfuerzo infinito. Vivamos en composiciones de música con esperanza.

No hay, no debe haber, un convencimiento absoluto, pero sí un empeño de que sea posible de algún modo mediante la comunicación de las noticias más loables, de las más positivas, de las que se acompañan de un don espiritual.

El espíritu Marley invade la nueva edición del festival Rototom Sunsplash

 

Benicassim acogerá entre el 18 y el 27 de agosto la 18ª edición de este festival europeo de reggae, consagrado ya como referente internacional musical y cultural. El cartel, como cada año, cuenta con numerosos artistas de referencia mundial, entre los que encontramos a grupos de la talla de Toots & the Maytals, Jimmy Cliff o Shaggy. Además, el grupo español Ojos de Brujo se subirá al escenario de manera extraordinaria, tras su retirada oficial del panorama musical, para actuar el último día del festival.

Este año, con motivo del 30 aniversario de la muerte de Bob Marley, el festival se nos presenta como un homenaje a su figura y a su recuerdo a través de actividades, charlas, y, por supuesto, la mejor música. El escenario contará con tres de sus hijos, Ziggy, Stephen y Kymani; además de con la presencia y actuación de su viuda, Rita Marley; y desde aquí iremos haciendo un seguimiento de todos estos actos.
Es ya un clásico escuchar aquello de “más que un festival” cuando oímos hablar del Rototom. Éste nació en Italia, en 1994, y a lo largo de los años fue cobrando tal importancia que pasó de ser un pequeño encuentro musical a una verdadera semana de convivencia en improvisadas ciudades- reggae. Se trasladó a España en 2010, tras la decisión del gobierno italiano de emprender medidas legales contra él, sin tener en cuenta en lo que se había convertido: un espacio de encuentro, convivencia y respeto entre todos aquellos que se acercan a disfrutarlo.
Así, este es el segundo año que se celebra este festival en nuestro país, atrayendo a público de todas partes del mundo, y promoviendo sobre todo la multiculturalidad y el respeto por el otro. Es el mensaje que se quiere transmitir desde la organización: “Durante años hemos insistido en el concepto del “encuentro” y para ello hemos extendido la duración del festival para de esta manera facilitar los momentos de sociabilidad. Para ello también hemos incrementado el número y la calidad de todos los eventos y situaciones alternativas al festival, como conferencias, debates, encuentros, talleres, cine y terapias para el bienestar”; motivos estos por los que la UNESCO ha reconocido y patrocinado el evento como “Acontecimiento Emblemático del Decenio Internacional para una Cultura Sin Fronteras (CSF)”.
Y es que el festival no sólo cuenta con horas y horas de actuaciones en directo de los más reconocidos músicos del panorama reggae, sino que organiza infinidad de charlas, entre las que hay que destacar la de la Nobel de la Paz 2003, Shirin Ebadi, debates (este año, además de aquellas que nos acercan al reggae, al mundo rastafari y a sus raíces africanas, se incluyen algunas orientadas al movimiento 15-M), actividades creativas para adultos y para niños, cursos de danza y de percusión o simposios artísticos abiertos a quien quiera participar, promoviendo siempre una conciencia de respeto y acercamiento a lo diferente.
Además, en consonancia con este concepto de armonía, el festival no podía sino contar con el reconocimiento de “A greener festival award” por ser uno de los festivales europeos más respetuosos con el medio ambiente, siempre buscando la sostenibilidad y el menor impacto ambiental posible.
El Rototom Sunsplash 2011 es una oportunidad única para conocer más de cerca esta cultura, que para muchos es ya un referente de vida.

http://www.rototomsunsplash.com/es/noticias/sunsplash/2279-rototom-2011-a-benicassim

Comuniquemos con la ciudadanía

Juan Tomás Frutos

 

La vida es una eterna premisa que hemos de utilizar como baluarte defensivo y de propulsión.

Digamos hola con gracia, con garbo, con buenas intenciones, comunicando la emoción de la experiencia, lo que somos en la noche de esos tiempos que no siempre vamos a ver como queremos.

Deseemos el bien propio y el ajeno como base de cuanto nos suceda, que ha de ser bueno, si somos capaces de cuestionar lo que nos merece todo crédito. La crítica constructiva siempre es necesaria.

Agudicemos el ingenio con una voluntad hermosa, con un propósito de avanzar en sociedad, de generar hábitos correctos.

Tengamos todo, no dejemos nada al azar que nos descontrola. Tampoco pensemos en dominar lo que sucede. Hay escenarios de libertad que nos condicionan en exceso. Por eso hemos de buscar la dicha de la autonomía, de la independencia pura.

Cultivemos los aspectos más novedosos, los deseos más sencillos, lo que nos ha de introducir en aventuras de planos maravillosos con los que justificar cuanto somos. Comuniquemos que tenemos sentido con los otros, con el resto de la ciudadanía.

Comunicar con generosidad

Juan Tomás Frutos

 

Consumamos las mejores experiencias para dar con ese punto crucial que andamos buscando desde el infinito mismo de los orígenes.


Sepamos lo que nos regala la dicha, y explotemos las mejores intenciones con un amor hermoso.

No demos con las gracias de otros años, ni tampoco esperemos en las eternidades que nos hacen figurar en trayectos medianos.

No pospongamos las soluciones que nos pueden colocar en esa prueba que, sin duda, superaremos, si nos lo proponemos.

Gustemos de emotividades. No hemos dado con las salubridades de otros instantes. Las cosas nos valen hasta cierto punto, con sus variables matices, de los que hemos de aprender.

Persigamos, sin obsesiones, la hermosura, aquello que nos puede permitir cosechar un buen hacer y un estado de ánimo óptimo. Es posible, todo es posible, siempre que nos entrelacemos con amor y generosidad, con buenas comunicaciones, con lo que hacemos cada día. La vida es sencilla, más de lo que imaginamos.

Comunicar voluntades

Juan Tomás Frutos

 

Consolidemos los valores comunicativos que consideramos básicos, y también demos con aquello que nos puede configurar con una cierta simpatía.

 

La vida perfecta existe si queremos verla como tal. Hagamos que el empeño de la felicidad sea algo duradero y sencillo, y, sobre todo, asequible. Es más dichoso el que menos persigue, el que menos necesita, el que acepta que las cosas son como son, como vienen.

La existencia tiene muchos propósitos. Hemos de procurar verlos, descifrarlos y sacarles partido. Todo tiene un fin, aunque no seamos capaces, en ocasiones, de conocer el porqué de lo que nos sucede.

Las manos amigas, por ello, se han de sostener como sea, sin fijarnos en intereses superficiales. Es muy importante contar con gentes que nos puedan ayudar cuando todo no marche sobre las ruedas conocidas o deseadas.

Las voluntades hacen algo, y el comunicarlas nos puede permitir subir a los escenarios donde la diversión y el aprendizaje sean esos instrumentos apasionados con los que llenar de azúcar nuestras vidas, que merecen descansos y éxitos, cuando menos en lo personal. Sintamos lo que transmite de verdad, y dejemos que el resto de cosas sean, verdaderamente, relativas.

Las fichas de la comunicación

Juan Tomás Frutos

 

Cuestionemos el sistema y el procedimiento de vez en cuando como manera de forcejear con el destino y de salir adelante. Todo es mejorable si asumimos que las vidas no son estáticas.

 

La Naturaleza, si la observamos, es puro dinamismo. La hemos de concebir como una formulación constante de lo que tiene sentido y de aquello que lo podrá tener en el futuro.

La vida es un regalo que hemos de aprovechar, como dicen mis amigos de ASPROVICT. Tengamos paciencia, seamos sensatos, compartamos lo que hacemos, lo que decimos, lo que sentimos, con aquellos que nos brindan sus mejores ideas, sus caricias, sus amores, sus aspectos más bondadosos.

El intercambio que nos viene de la relación y de la comunicación, como dos caras de la misma moneda, nos debe hacer sentirnos plenos, vivos, en dinamismo real. Tomar conciencia de lo que realizamos para ver lo que nos hace bien y lo que no nos procura beneficio puede ser una actividad que nos conduzca a una mayor construcción de nuestro discurrir cotidiano.

Las fichas de la comunicación, sus píldoras, sus prestaciones, son muchas, y, además, extensibles, por lo que las hemos de tener siempre cerca. Dispongamos generosamente de su presencia, y fermentemos con buen abono de amistad y de amor cuantas nos encontremos por el camino.

Pugna comunicativa

Juan Tomás Frutos

 

El deseo interior debe salir a flote antes de que se extinga. Todo tiene su tiempo, su duración, y no hemos de jugar con oportunidades que, muchas veces, son irrepetibles. Superemos las dudas con actividades cercanas y permanentes.

 

Tomemos en consideración los buenos consejos, que pululan por ahí con más frecuencia de la que captamos. Hemos de aliviar las penas con ópticas un poco diferentes. Las aplicaciones de remedios suponen unas actividades con las que podremos crecer en las diarias construcciones de las realidades que nos salpican con sus actividades más hermosas.

Hemos de añadir a todo lo que nos acontece una ilusión, o dos, en el afán de poder suscitar los mejores y más lindos propósitos. Hemos de aguar la fiesta (en el sentido de refrescar) con una trayectoria sugerente. No deben faltar las buenas caricias.

Las terminaciones nos deben implicar en las divergencias más experimentadas. Hablemos de amor, de honor, de sencillez, de conocimiento, de ayudarnos a seguir adelante con el fin de juntar y de poder en la bondad misma, con ella, procurando disponer de la verdad como mejor quehacer.

De todo podemos rescatar algo: hay emociones que nos valen, intereses, posibilidades, querencias, simpatías, actividades, sentimientos, conocimientos, inteligencias, apetencias, singularidades, especificidades, ánimos, contrastes, secuencias nobles, y otras que no lo son tanto…

Demos con las soluciones antes de aproximar los problemas. Las enterezas de otros años nos imprimen un carácter con el que hemos de aumentar la felicidad a la que, indudablemente, tenemos derecho. Por ello, comunicativamente, hemos de pugnar.

La divisa de cada día

Juan Tomás Frutos

 

Todo es factible. La vida regala momentos de pura felicidad. Es cierto que hay otros que quita, pero hemos de pensar en el valor añadido de lo que existe, de lo que es, de lo que nos puede portar a un sentido no imaginario, sino real y posible.

 

Las controversias deben quedar atrás, diluidas en lo que no es importante. Las diversiones nos deben trasladar hasta ese punto de apetencias compartidas. Las peculiaridades nos deben servir para aplicar remedios a las sintonías que no siempre nos unen por los cabos necesarios. No dejemos suelto lo relevante.

Ejecutemos las ilusiones. No las dejemos para otro día en el camino del olvido, y pensemos con esa gracia que nos conjuga con comunicaciones de concordia y buenas pretensiones. Hagamos que el todo nos incluya en ese instante de puro poder, de preferencias, de tensiones resueltas.

Resolvamos las enemistades con un estrechamiento de manos, con un abrazo, con una palabra amable, con un gesto de oportunidad y de cesión ante las circunstancias que no siempre comprendemos en su totalidad.

Consumamos las emociones con esa grandeza que nos hace vivir en espíritu, en deseos, en ardientes premisas llenas de compromiso y de amistad. Los aromas de los buenos actos comunicativos, de las negociaciones para que todos ganemos, o perdamos, de las relaciones que persiguen la eternidad de sus resultados, han de constituirse en el eje de toda actividad humana. Pregonemos esta divisa con lo que hacemos cada día.

 

 

La comunicación, clave

Juan Tomás Frutos

 

Amansemos los aspectos fieros que podamos llevar en el interior. Hagamos del mundo un sitio más bondadoso, más cercano, más lleno de soluciones frente a los problemas, con la paz como único camino, con la devoción por el entendimiento como base de solución a los elementos más o menos discordantes.

 

Hemos de conectar con lo que nos rodea dando crédito a los destellos de esas luces que antes no teníamos en cuenta. Saquemos lo mejor de cada cual para preconizar arreglos. Nos hemos de poner a sumar más y más, sin detenernos en números, en aspectos cuantitativos, sino en el bien que podemos realizar.

Aglutinemos esas fuerzas que necesitamos para tiempos más convulsos. No siempre salen las cosas como queremos, y para ello hemos de estar preparados. Situemos las virtudes en esos lugares donde el paso nos ha de valer con sus interrogantes y con sus posibles errores.

Sacudamos ese polvo que nos puede romper en pedazos que no lograremos contabilizar. La existencia tiene mucho que ofertar, si nos volcamos en lo que es útil, en lo que nos puede hacer sentir de modo que seamos más felices.

Situemos el campo de la verdad en ese justo sitio donde los sentimientos se unen para empatías y conocimientos claros y sinceros. Hagamos que las opciones funcionen en tiempo y forma. La comunicación es clave: lo es, y lo tiene que ser.

 

 

UNIVERSIDAD DE MURCIA