Dos estudios elaborados por profesorado de la Universidad de Murcia han conseguido un áccesit en los XXXII Premios de Estudios Financieros que convoca el Centro de Estudios Financieros (CEF), cuya entrega de premios se celebró en Madrid.
Los profesores de la facultad de Economía y Empresa Samuel Baixauli y Gabriel Lozano firman, junto con Gregorio Sánchez, catedrático de la Universidad de Alcalá, han obtenido el premio en la modalidad de ‘Recursos Humanos’ por un artículo ‘Activismo accionarial y retribución de los altos directivos: la influencia del say-on-pay en las empresas cotizadas españolas’.
Este trabajo versa sobre el Say-on-Pay (SOP), que es una votación realizada en junta general que permite a los accionistas de las empresas cotizadas pronunciarse –mediante un voto a favor, en contra o una abstención– acerca de la idoneidad de las retribuciones de sus directivos. En concreto, el trabajo explora los efectos del SOP sobre el diseño de la retribución de los CEOs de las empresas cotizadas españolas durante el periodo 2013-2020, analizando el grado de activismo existente, así como los efectos de la votación sobre el diseño de los paquetes retributivos. Los resultados indican que el SOP promueve la participación de los accionistas en los asuntos de gobierno corporativo relacionados con la retribución, además de fomentar diseños retributivos para los CEOs más vinculados con los resultados empresariales.
El otro trabajo premiado, en la categoría de Derecho Civil y Mercantil, es el de la profesora de la facultad de Derecho Luz Sánchez García, por un trabajo titulado ‘Las pseudoinvenciones generadas por algoritmos, ¿jaque al estado de la técnica?’.
La investigación aborda los conocidos como algoritmos creativos, como es el caso de ‘All Prior Art’ o de ‘All The Claims’, que ponen en jaque conceptos tan relevantes para el Derecho de Patentes como el “estado de la técnica”. La autora defiende que la mayoría de los resultados -pseudoinvenciones- generados por estos algoritmos, carecen de sentido o lógica alguna pero, habida cuenta de que el coste de crearlos y publicarlos computacionalmente es prácticamente nulo, si fuesen considerados válidos desde el punto de vista del Derecho de patentes, se aumentaría el nivel y volumen de conocimiento incorporado al estado de la técnica, que ha de ser tomado en consideración por parte del experto en la materia que ha de evaluar la novedad o la actividad inventiva ante una solicitud de patente. Este trabajo de investigación analiza el nuevo escenario planteado y ofrece soluciones adecuadas a la situación actual.