Reflexiones sobre la ley general de comunicación audiovisual

Mientras la futura Ley General de Comunicación Audiovisual sigue su trámite, una vez aprobada por la Comisión Constitucional del Congreso, y cuando se dirige al Senado para su oportuno análisis y consideración, hacemos una serie de reflexiones:

-Aplaudimos la creación del Consejo Audiovisual. Es positivo. Pedimos que tenga más competencias y que, en caso de propuesta de cierre o de fuertes sanciones, sea ratificada la decisión por un juez especializado en el sector.  Solicitamos, igualmente, que las organizaciones profesionales tengamos presencia en ese Consejo.

-Nos preocupa la financiación de la televisión del Estado. De hecho, que RTVE no aparezca como un servicio público esencial en esta Ley es un paso atrás (así lo consideramos).

-Pedimos máxima protección para los menores. En algunos casos queda como una serie de intenciones. Quizá se pueda llegar más lejos que lo que establece la normativa básica europea. Recordemos que hay un Código de Autorregulación firmado entre el Gobierno y las televisiones. Reclamamos que se cumpla. El sector debe ser capaz de autorregularse desde la ética y la deontología.

-Nos gusta la limitación que se hace de la publicidad, si bien pedimos un máximo de 12 minutos incluyendo publicidad, autopromociones y tele-promociones.

-Se permite la unión, la fusión, de televisiones privadas, y nos parece bien, pero hay que pensar en los trabajadores. Se han de garantizar unos mínimos y velar por ellos. El sector de la comunicación tiene unos altos índices de precariedad, de bajos salarios y de desempleo. Si no hay calidad en el trabajo, se puede poner en tela de juicio el resultado del quehacer informativo y comunicativo.

-La Ley expresa la prohibición de emitir anuncios que puedan promover en  los más pequeños el culto al cuerpo. Pedimos cuidado también en este sentido en las autopromociones, en las tele-promociones y en las mismas películas, series y el resto de los espacios.  Reclamamos responsabilidad y autocontrol en este sentido también.

-Nos parece bien poner orden en el panorama radiofónico.

-Esta norma establece la prohibición de emitir en abierto y para todos los públicos aquellos contenidos esencialmente pornográficos o de violencia pura, dura y gratuita. Pedimos, por favor, que se cumpla a rajatabla.

-Quizá habría que expresar, además del fútbol, más contenidos de interés general.

-Bien por fijar garantías de acceso a los discapacitados y por la promoción de la igualdad real a través de las televisiones televisivas. Pedimos, obviamente, que esto no se quede en una declaración de intenciones.

Ojalá que el esfuerzo que se está realizando entre todos nos lleve al punto que todos también deseamos.