“El M20F ha conseguido que la gente se dé cuenta de que salir a la calle y exigir cambios es una posibilidad real”. “La nueva constitución marroquí ha sido aprobada por un descarado y amañado referéndum”. Hace justamente un año, miles de manifestantes salieron a las calles en las principales ciudades de Marruecos reclamando una nueva constitución y gritando lemas como “Menos poder para la monarquía” o “El rey debe reinar pero no gobernar”. Había nacido el Movimiento 20 de Febrero, un movimiento liderado por jóvenes que pedían derechos tan elementales como Libertad, democracia y derechos humanos. Pero el hecho constituía algo prácticamente impensable en Marruecos hasta entonces. 

Desde entonces, el rey Mohammed VI ha movido ficha, ofreciendo una constitución aprobada en un controvertido referéndum. Pero la manera en que se han hecho esta reforma, liderada y tutelada en todo momento por el monarca y su sempiterno Makhzen –la clase más poderosa y unida al trono- es considerada por los miembros de este movimiento como una manipulación. Nadir Bouhmouch, un marroquí formado cinematográficamente en la Universidad norteamericana de San Diego, ha decidido documentar las revueltas que se produjeron en su país, para informar al mundo de ese movimiento liberador denominado 20 de Febrero para que nadie desconozca ni olvide este impulso democrático que el joven realizador asegura quiere ser apagado por quien, en su opinión, controla los medios de información en su país: el Makhzen, la clase poderosa que rodea al rey de aquel país. La película, un documental de 40 minutos, será proyectada hoy lunes 20 de febrero en numerosas ciudades de todo el mundo. En Murcia lo hará a las 19 horas, en el salón de actos del edificio Rector Sabater, en Ronda de Levante, en un acto que está organizado por ACSUR Murcia, el Área de Ciencia Política de la Universidad de Murcia y la Asociación Marroquí de Derechos Humanos en Madrid, y que cuenta con el apoyo del CSA la Tabacalera.

Imagen del documental “My Makhzen and me”

-Pregunta: Un año después del inicio de las manifestaciones, ¿cómo se encuentra el movimiento 20 de febrero en Marruecos? -Respuesta: Después de un año las protestas se han ido reduciendo, y hoy son una excepción. A pesar de ello, las manifestaciones son constantes y se mantienen. Las elecciones de noviembre han sido las primeras tras la reforma constitucional. Después de ellas el movimiento ha llegado a ser más homogéneo debido a la salida de los islamistas del mismo. El movimiento está centrado en otras formas alternativas de resistencia. Ahora estamos enfatizando las reivindicaciones el ámbito del arte y con esta idea pensamos  inaugurar en el Festival de Arte de Rabat “Resistencia y Alternativas”.
-P: ¿Ha conseguido alguno de los objetivos propuestos? -R: Sí, pero sólo sobre el papel. El modo en que la nueva constitución fue redactada es profundamente más democrático que la anterior. Pero sólo aparentemente. Sólo porque un papel diga que las cosas están supuestamente hechas de un modo no significa que sea así en realidad. El Makhzen es muy astuto para sortear las leyes. Por ejemplo, en la nueva constitución el rey ya no va a ser quién  designe al gobierno. A pesar de esto él tiene el poder de vetar las elecciones que el  primer ministro haga de su gobierno. Mi opinión es que nosotros hemos conseguido avances de forma, sobre el papel, pero no avances reales. Lo que nosotros, el Movimiento 20 de febrero, sentimos que hemos logrado, es sentar un precedente para las personas marroquíes. Hemos conseguido que la gente se dé cuenta de que salir a la calle y exigir cambios es una posibilidad real.
-P: Uno de los gritos coreados en este movimiento era que “El rey debe reinar pero no gobernar”. ¿Creen que un monarca educado en el absolutismo puede ser reconducido hacia la democracia que ahora se le reclama? -R: Es interesante esta cuestión, sobre todo viniendo de España: puede ser muy ilustrativo utilizar el ejemplo español. La monarquía en España se ha mantenido intacta desde la dictadura de Franco. Creo que ocurre lo mismo en Marruecos. Entiendo que la presencia del rey tiene un efecto unificador sobre el pueblo marroquí. Pero el modo en el cual la élite marroquí y el rey se comportan se convertirá en insostenible y ese efecto unificador desaparecerá. Si el Movimiento 20 de febrero desaparece ahora, en el futuro, las personas llenarán las calles, gritarán slogans como los que se escucharon en las calles de Egipto y Túnez. Las personas pedirán que el sistema entero desaparezca. No es demasiado tarde para salvar nuestra tradición monárquica (cuando me refiero a la tradición monárquica quiero aclarar que para mi la monarquía sólo puede tener poderes formales).
-P: Al contrario que en otros países de África, Mohammed VI anunció ciertas reformas para acallar el movimiento. ¿Hasta donde han llegado estas reformas? -R: Las reformas han tratado varios aspectos que eran necesarios cambiar en Marruecos. El cambio principal, sin embargo, fue transferir el poder de designación del gobierno del rey al Primer Ministro. Con el poder en manos del Primer Ministro, éste podrá designar al nuevo gobierno y sus propios ministros. (pero como ya he mencionado anteriormente esto sólo es sobre el papel, ya que el rey puede vetar la composición del gobierno).
-P: ¿Son suficientes para quienes están implicados en el 20 de febrero? -R: Las reformas no son suficientes para el M20F. Cualquier constitución que se considere democrática no puede caer en errores en los que ha caído la nueva constitución de Marruecos, a saber:
1.    Ser diseñada por un una comisión que no sea elegida por el pueblo y no  por el rey como ha sido el caso de esta. 2.    Dejarse sólo un par de semanas de campaña para el referéndum constitucional. 3.    Ser aprobada por un descarado y amañado referéndum en el cual el 98% de las papeletas decían SI a la constitución.
Todo esto, definitivamente, no es democrático. Así que con estas bases antidemocráticas todas las reformas serán ilegítimas, aunque haya alguna que pueda ser buena y mejore las cosas. (para hacer más visible el interés de la nueva constitución marroquí) Voy a citar una de las frases que aparecen en la película: “La constitución menciona  la palabra rey 61 veces y la palabra pueblo una sola vez!”
-P: Se ha dicho que el cine es el arma política más eficaz. Ahora este documental se va a proyectar de manera simultanea en todo el mundo ¿Qué espera conseguir con esta iniciativa?
-P: Espero hacer varias cosas con este documental. En primer lugar será como una especie de póliza de seguros para el M20F. En caso de que el movimiento cayera, la película serviría como herramienta que recordase una parte importante de la historia de Marruecos. Pienso en esto porque sé que el Makhzen intentará eliminar simplemente borrar al M20F de la historia de Marruecos e intentará cambiar lo que pasó realmente durante el año 2011 y 2012 con su propia versión de la realidad y de los hechos, magnificando y glorificando la figura del rey y de su reforma. Por eso yo quiero, en primer lugar, hacer algo con este documental que inmortalice las hazañas del M20F en la historia marroquí, y que en el futuro, el pueblo marroquí tenga siempre la opción de ver algo más que no sea la propaganda que el Makhzen y el rey les cuentan. Así también el pueblo marroquí sabrá siempre que, si ellos quieren cambiar algo, la calle es siempre una opción y que su voz puede ser oída. Para aquellos que vivimos fuera de Marruecos, quiero demostrarles que los medios de comunicación no siempre cuentan lo que está pasando realmente. El Makhzen controla la mayoría de la información que sale del país, con mi trabajo he querido romper esta situación. Una película-documental que contradiga lo que ellos dicen. Quiero humillar al Makhzen en el tablero internacional.
En primera persona

La presencia del rey tiene un efecto unificador sobre el pueblo marroquí, pero ese efecto podría desaparecer.
Si el M20F desaparece ahora, en el futuro, las personas llenarán las calles, gritarán slogans como los que se escucharon en las calles de Egipto y Túnez.
La constitución marroquí tiene bases antidemocráticas, por lo que todas las reformas serán ilegítimas.
La constitución menciona  la palabra rey 61 veces y la palabra pueblo una sola vez.
El Makhzen intentará borrar al M20F de la historia de Marruecos.

Con mi película quiero que el pueblo marroquí pueda ver algo más que no sea la propaganda que el Makhzen y el rey les cuentan.
Quiero que el pueblo marroquí sepa que la calle es siempre una opción y que su voz puede ser oída.
El Makhzen controla la mayoría de la información que sale del país, yo he querido con mi trabajo romper esta situación.