Nota-Camas

“Habitación con vistas al pabellón docente UMU”

Paciente habitación 241.2

Jueves 18.01.24, 18.30pm., ingreso por lesión ocupante expansiva (LOE).

Martes 23.01.24, 14.15pm. alta hospitalaria y recuperación en casa.

18m2, equipamiento hospitalario, cuarto de baño compartido, dos camas y una ligera cortina de separación que expone “las vergüenzas” e intimidades de los dos vecinos de viaje, que, a pesar de un intento de aislamiento zonal, te llega información que no te interesa o necesitas escuchar. Privacidad poca, pero calidad absoluta por parte del personal que te recibe y atiende en los momentos iniciales de nervios e inquietud.

¡Cuánta paciencia, profesionalidad y humanidad!

Evocar un solomillo a la plancha en la mente de un paciente tal y como hacía Marcel Proust con las magdalenas de su abuela, en su obra “En búsqueda del tiempo perdido” es una de las mejores técnicas de recuperación para quien aspira volver lo antes posible a su ritmo de vida normal. Gracias, Álvaro.

Gracias al personal de administración, enfermería, limpieza, celadores, técnicos, doctores, Pablo, Loli, Álvaro, Dori, Pepa, Fuensanta, Ana, Luisa, David y tantos otros nombres propios que ahí trabajáis.

Gracias a todos y cada uno de vosotros que formáis parte del servicio de neurocirugía del equipo del Dr. Piqueras de la Arrixaca. Cirujano sí, “explicador” también, en ambos casos un lujo tenerte. Gracias, Claudio y viva la cosecha del 61.

España: única, diferente y complementaria: de norte y sur, de lluvia y secano, de frío y calor, de interior y de playa, de contraste puro y permanente. La España del traicionado Viriato por unas monedas de plata; la de “en horas 24 pasa de las musas al teatro”, de López de Vega, la que pasa de héroe a villano por un “tweet” mal redactado. La España también que pasó de los aplausos al ritmo de “resistiré” al silencio, dejando en el olvido la enorme labor, diaria y constante, que hace nuestro personal sanitario 24/7.

Reflexión abierta, sin duda de agradecimiento, para poner en valor y reconocer el Sistema Público Sanitario Español, así como a todo en el que en él trabaja y para instar a todos de quien depende su mejora a seguir invirtiendo en ella, pues todavía resta mucho por avanzar. La Educación y la Sanidad, dos pilares de nuestro sistema del bienestar requieren inversión en formación, en personal, investigación, infraestructura y en tecnología. Estas cuestiones, y no otras de menos envergadura, deben ser de máxima prioridad para los políticos que suelen pedirme el voto. Sirvan estas líneas para instarles a focalizar su trabajo hacia grandes proyectos del bien común.