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Pedro Cano: “Me gustaría que mi exposición nos hiciera reflexionar sobre lo complicado que resulta la sencillez”

Pedro Cano en el museo que lleva su nombre.
Pedro Cano en el museo que lleva su nombre.

 

El artista presenta una exposición en las dos universidades públicas en el comienzo del curso
“Seguramente, el haber nacido en Blanca ha sido esencial para que estas hojas de papel se realizasen”.  Así de rotundo se pronuncia el pintor blanqueño Pedro Cano, doctor Honoris Causa por la Universidad de Murcia, sobre la exposición “Tres espacios un artista”, que servirá de colofón artístico a la inauguración del curso de las Universidades públicas de la Región, que se celebrará este año en la Universidad Politécnica de Cartagena. Será el próximo jueves día 22 de septiembre en la Facultad de Ciencias de la Empresa (Antiguo Cuartel de Instrucción de Marinería. CIM), una vez finalizado el acto académico. Se trata de un proyecto LIVE CAMPUS MARE NOSTRUM 3738 – ESIT CULTURA.

Viéndole en su estudio, resulta fácil comprender todo lo que implica esa afirmación del pintor. Desde su lugar de trabajo en Blanca se domina todo el pueblo: los abigarrados tejados coronan un lugar que parece detenido en el tiempo. El río y esa exuberante huerta cuya feracidad ya fue cantada por los primeros árabes y a cuyos frutos ha sabido extraer el artista su auténtica esencia, su belleza, una personalidad única que enamora inexorablemente al espectador: “Lo bueno que tenemos en Blanca es que no hace falta movernos del pueblo para disfrutar de la naturaleza, basta con asomarse, y por cualquier sitio se nos aparece la huerta, con esos colores y esas formas que nos embriagan”. 

 

Sensaciones cotidianas

“Se trata de cosas que me acompañan todos los días –asegura-, forman parte de mi vida. Me gusta estar sumergido donde estoy y hacer lo que hago. Cuando estoy en Blanca, lo que más me gusta es levantarme temprano e ir a la huerta”.

Pedro Cano se contempla en una vieja imagen de uno de sus viajes.Pedro Cano se contempla en una vieja imagen de uno de sus viajes.

Pedro Cano insufla carnalidad a sus creaciones. Es fácil comprobarlo mirando esta exposición que se exhibirá hasta el 20 de octubre en la Universidad Politécnica de Cartagena, y que viajará posteriormente a la Universidad de Murcia, concretamente a la Biblioteca General del Campus de Espinardo, donde se expondrá del 27 de octubre al 2 de diciembre, y al propio Rectorado, donde podrá ser disfrutada del 14 de diciembre al 13 de enero. “Los olores y los colores de los frutos y de las flores fueron en mi niñez las primeras sensaciones de placer y belleza. Sobre todo cuando acompañando a mi madre al pequeño huerto familiar, descubría cómo habían coloreado los tomates en una noche o cómo una rosa había nacido sin darnos cuenta”, evoca Pedro Cano. Forma y color, captar el interior, el espíritu de pequeños objetos…, alma e intencionalidad de artista que describe así la muestra: “Mi exposición está constituida por una serie de acuarelas de gran tamaño de flores y frutos. Es un trabajo donde no hay más que agua y color sobre una hoja de papel”. En la exposición, Pedro Cano vuelve a esas raíces, que impelían al artista a reflejar en el papel las pequeñas cosas que le rodeaban: “Son todas cosas que he retratado en mi pueblo, en mi estudio de Blanca. Excepto un par de obras, las más viejas, unas hortensias y unas azaleas, que están hechas en Italia, el resto, naranjas, nísperos, rosas…, son de mi huerto, en Blanca, y todas están hechas del natural”.

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No se comprendería de otra forma. La esencia de estos frutos sólo puede ser aprehendida y plasmada en un lienzo si el artista convive directamente con ellos. Esto lo sabe Pedro Cano, que asegura haber tenido que llegar a la madurez para asimilar que la emoción puede residir en esas pequeñas cosas que nos rodean, y para comprender que fueron muchos los grandes artistas que le precedieron en este intento: “Cuando uno pinta una flor parece que es algo cursi, fuera de moda, pero hay grandes pintores en la historia de la pintura, como Zurbarán o Durero, que ya lo hicieron, y entre los recientes, Mondrian, por ejemplo, que han llegado a hacer extraordinarios trabajos sobre flores, son trabajos que nos siguen emocionando mucho tiempo después”.
Reflexionar sobre la sencillez

 

 

De ahí que el pintor tenga un deseo claro ante la muestra que ahora inaugura: “Me gustaría que mi exposición nos hiciera reflexionar sobre lo complicado que resulta la sencillez” Pedro Cano se encuentra actualmente trabajando en una serie sobre Pompeya, de la que una parte ha sido ya expuesta ya en Roma –“me gustaría llevarla hasta la misma Pompeya”-. “Pero me gusta parar del trabajo grande –asegura-, del trabajo más complejo, cortar, por ejemplo, una granada o una rosa y analizarla en el estudio”. “A menudo nos olvidamos de cual es el a, e, i, o, u, el principio de las cosas, lo más elemental. Me gustaría que mi exposición nos hiciera reflexionar sobre lo complicado que resulta la sencillez”. “Con este trabajo que ahora expongo en las universidades de Murcia y Cartagena se ve muy claro. Se trata de cosas muy sencillas, elementos que nos acompañan y que he tenido delante de mí para pintar”. Los sencillo que sigue a lo complejo, lo pequeño en contraposición de las grandes cosas…el artista, siempre el mismo y siempre diferente. Se nos antoja que en Pedro Cano hay una serie infinita de Pedros Canos agazapada tras los pinceles y los colores para sorprendernos continuamente. “Lo que ocurre es que no me gusta quedarme en el mismo lugar, prefiero cambiar, pero siempre acabo volviendo a mis temas que quiero”. “Cuando hago una exposición como ‘La identidad del tránsito’, -nos asegura-, con aquellas enormes personas andando de espaldas, me apetece un tema como éste. Es como si después de haber leído un libro muy complejo, nos decantáramos por un poema ligero, por algo sencillo, algo además apegado a la tierra en este caso”.

El artista posa con la obra original que sirvio de portada de la revista Campus.El artista posa con la obra original que sirvio de portada de la revista Campus

Un doctorado honoris causa emotivo

 

A comienzos del 2006 fue protagonista en la Universidad de Murcia, alcanzando la máxima distinción que otorga una Universidad, la del Doctorado Honoris Causa: “Todavía me acuerdo de la emoción que sentí entonces. Una emoción mezclada con los nervios más grandes que he tenido en mi vida, cuando leí aquel discurso que había preparado con tanto cariño”. Cinco años después una exposición suya es la encargada de poner el broche de color a la inauguración del curso de los centros públicos en la Universidad Politécnica de Cartagena. “Yo apoyé la vinculación de las dos universidades en el proyecto Mare Nostrum, creo que es algo muy importante que las dos universidades públicas de la región estén hermanadas”.  Además, asegura, “Cartagena siempre me ha encantado. Y así lo estoy reflejando ahora en un trabajo que estoy preparando, que se llama “Nueve mediterráneos” y que constituye un viaje sentimental por nueve ciudades del Mediterráneo, que nace en Cartagena, pasa por Alejandría y llega hasta Estambul.
Convenio con estudiantes de Bellas Artes

El artista, que asegura tener una concepción romántica de la universidad, “como transmisora de un concepto tan bello como la educación”, firmó el pasado mes  de mayo, en nombre de la Fundación que lleva su nombre, un convenio de colaboración que permitirá exponer a los estudiantes de Bellas Artes de la Universidad de Murcia en su sede de Blanca. El convenio recoge también otras fórmulas de colaboración en el futuro, entre otras, la realización conjunta de proyectos de investigación, el desarrollo de cursos y las prácticas de alumnos en esta Fundación. “Una de las cosas más importantes para la fundación que lleva mi nombre es que tenga las puertas abiertas a todo el mundo. Y sobre todo a la universidad, a la que yo tengo un cariño y un respeto enorme”. “Me parece magnífico que la Universidad de Murcia dignifique nuestro espacio y que nos ofrezca la posibilidad de contar con la presencia de sus profesores y alumnos”.
El mar y Pedro Cano
De momento, quien sí se prodigará en la universidad será el propio artista, que a la exposición de la muestra en la Universidad Politécnica de Cartagena y la de Murcia, une su participación en el curso “La Herencia del Mediterráneo, cuya charla ‘El viaje y la memoria’ será la encargada de clausurar la actividad a mediados de diciembre. “Será una conferencia en la que intentaré deambular por la memoria a partir de mis primeros viajes al mar. Hablaré sobre lo que ha supuesto el mar durante toda mi vida y de algunos de los pormenores que han rodeado los numerosos viajes que he hecho por el Mediterráneo, a veces en condiciones muy complicadas, pues hace 40 años, cuando yo empezaba a viajar, era muy difícil moverse por determinado lugares de Grecia e Italia”. “El mar –asegura Pedro Cano- ha sido siempre una necesidad en mi vida. Siempre que mi trabajo me lo ha permitido, he intentado ir a Turquía, a Grecia, a Cerdeña, a Sicilia… El Mediterráneo me ha dado muchísimo”.

Última actualización el Martes, 27 de Septiembre de 2011