El economista Paul de Grauwe y la escritora Maryse Condé entran en el cuadro de honor de la Universidad de Murcia

La Universidad de Murcia ha celebrado este viernes uno de sus actos más solemnes con la investidura como doctores honoris causa del economista Paul de Grauwe y la escritora Maryse Condé; dos ejemplos de excelencia profesional y académica en sus respectivos campos de trabajo. El rector, José Luján, ha agradecido a ambos su “generosidad y disposición por aceptar la propuesta de la Universidad de Murcia” y les ha dado la bienvenida a la comunidad universitaria de la UMU.

Paul de Grauwe, profesor de la London Economics of London, tiene una dilatada trayectoria académica e investigadora que le ha llevado a trabajar como asesor en organismos internacionales como el FMI, el Banco Central de Japón, la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) y el Banco Central Europeo. Además, también fue asesor del presidente de la Comisión Europea Joao Barroso entre 2005 y 2010. Entre los innumerables méritos de De Grauwe, el profesor José García Solanes, encargado de hacer la laudatio, ha señalado de forma especial que, en un artículo publicado en 1998 en Financial Times, fue capaz de predecir la burbuja inmobiliaria y el colapso del sistema bancario y financiero que finalmente acabaría ocurriendo en 2008. Este hecho, ha señalado el rector Luján, “además de probar la perspectiva de su perspicacia e inteligencia, de alguna manera también revela la humildad y limitaciones de nuestro trabajo como investigadores, pues con harta frecuencia las autoridades e instituciones que deberían servirse del mismo hacen caso omiso de las advertencias, propuestas y sugerencias de los científicos”. Sin embargo, ha remarcado Luján, esto no debe alterar la vocación de servicio universitaria “especialmente perceptible en quien, como el profesor De Grauwe, concibe el objeto de su estudio como ciencia al servicio del bienestar humano y social”.

Paul de Grauwe ha iniciado su discurso agradeciendo la concesión de del doctorado honoris causa y ha asegurado que “no se trata solo de un honor, sino también de una fuente de aliento para que un investigador académico como yo persevere en su búsqueda de la verdad”.

Gran parte de esta labor investigadora ha estado dedicada al estudio de la economía de la unión monetaria en Europa y su discurso de aceptación se ha centrado también a este tema bajo el título ‘¿El fin de la fragilidad de la Eurozona?’. Tras un completo repaso a la historia de la Eurozona, sus elementos de desequilibrio y los mecanismos utilizados por el BCE para afrontar los diferentes problemas, De Grauwe ha concluido que la Eurozona seguirá siendo “una construcción frágil”, salvo que se tomen medidas radicales como la de “centralizar gran parte de los presupuestos nacionales en un presupuesto federal europeo”.

Tras la investidura del profesor De Grauwe ha tenido lugar la de la escritora Maryse Condé, premio Nobel alternativo en 2018 y una de las voces más representativas de las letras francófonas. Condé ha recibido el doctorado honoris causa por su dilatada trayectoria como escritora, pero también por su labor como docente e investigadora. Dramaturga, novelista y ensayista, Maryse Condé es pionera de la escritura femenina y de la oralidad del universo insular de las Antillas, tal y como han destacado en su laudatio la profesora Antonia Pagán. El rector Luján ha destacado que Condé “ha llegado a ser un referente de la escritura femenina y una crítica difusora de la historia y la cultura africana y colonial”. Su compromiso por dar voz a los sectores más marginales y a favor de la diversidad le han valido numerosos reconocimientos a lo largo de su trayectoria.

En su discurso, leído por su marido, Richard Zircot, la escritora ha agradecido el doctorado honoris causa, la primera distinción de este tipo que recibe en Europa. Condé ha querido remarcar en su intervención no solo aspectos académicos, sino también algunas anécdotas familiares de su infancia y episodios de racismo que forjaron su carácter y la vocación de su literatura. En su discurso ha recordado de manera especial a su madre: “Es ella, sin duda, quien aún más que yo, se sentiría homenajeada y estaría orgullosa de este doctorado honoris causa. No solamente los negros están en la Universidad, sino que se les reconoce en su valía y las universidades extranjeras les otorgan doctorados”.

El rector ha finalizado el acto asegurando que tanto Condé como De Grauwe son “el ejemplo visible de la mejor universidad porque han sabido hacer de su vida de estudio y trabajo paradigma en los ámbitos de la economía y de la literatura, ofreciéndosenos como modelo y guía”.

Investigadores de la UMU y el IMIB demuestran que los trasplantes de células madre son más eficaces si se realizan con células del mismo paciente

Este estudio trata de esclarecer cuáles serían los trasplantes que mejor funcionarían en el sistema nervioso central aplicando todas las variantes, un paso que no se había tenido en cuenta hasta ahora y que afecta a los resultados de los ensayos clínicos y preclínicos.

 Una investigación del grupo de Oftalmología Experimental de la Universidad de Murcia (UMU) y el Instituto Murciano de Investigación Biosanitaria Pascual Parrilla (IMIB) ha demostrado que la eficacia terapéutica del trasplante de células madre mesenquimales depende en gran medida del grado de compatibilidad genética entre el donante de las células y el receptor del trasplante. Por ello, este estudio afirma que los resultados serían más eficaces si se utilizaran células de la médula ósea del propio paciente.

Las terapias con células estromales mesenquimales (MSC), similares a las conocidas como ‘células madre’ pero que permanecen durante toda la edad adulta, son una herramienta prometedora para tratar patologías del sistema nervioso central, es decir, del cerebro y la médula espinal. Sin embargo, los ensayos clínicos para lograr el rescate de neuronas del sistema nervioso no han tenido el éxito esperado.

“Las enfermedades neurodegenerativas, como el glaucoma, alzhéimer o el párkinson, son muy diversas y la investigación preclínica no ha seguido unos protocolos fijados, por lo que resulta difícil saber si los resultados favorables o infructuosos dependen de la fuente de células, del tipo de trasplante (entre la misma o distinta especie) o del modelo de patología”, explica Marta Agudo Barriuso directora de este trabajo junto a David García Bernal.

Para resolver este complejo escenario, los expertos consideran que estas variables deben evaluarse de forma independiente y es lo que precisamente han tratado de esclarecer con sus últimas investigaciones.

Éxitos según el trasplante

Por regla general, la investigación con MSC se ha estudiado con células humanas en modelos animales; es decir, mediante xenotrasplantes, aquellos que se producen entre distintas especies. Sin embargo, para minimizar la respuesta inmune del cuerpo y los posibles rechazos, los protocolos clínicos se basan en su mayoría en alotrasplantes, donde el donante y el receptor pertenecen a la misma especie, pero son diferentes genéticamente, como suele suceder en los trasplantes de órganos humanos. En estos casos se inmunodeprime al paciente para evitar que su cuerpo tome el nuevo miembro como algo ajeno. No obstante, el trasplante ideal en clínica sería aquel en el que el donante y el receptor sean genéticamente idénticos: autólogo, con células madre del propio receptor, o singénico, con células donadas por un gemelo.

Los investigadores se preguntaron cómo se puede estar seguros de que un resultado satisfactorio con células humanas en un modelo animal determinado, como el ratón o el cerdo, puede trasladarse a los pacientes cuando se sabe que la respuesta inmune puede tener un efecto importante en el resultado, ¿mejoraría en un escenario singénico o alogénico?

Así, en este trabajo publicado en la revista Stem Cell Research & Therapy en colaboración con el Grupo de Trasplante Hematopoyético y Terapia Celular del mismo instituto y Laboratorio de Hematología Experimental, Vacunas y Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Amberes, los autores compararon el efecto de cada tipo de trasplante en la retina sana, y demostraron que las MSC de la médula ósea, una vez que son trasplantadas en el vítreo de ratones, sobreviven durante más tiempo cuando se trata de un trasplante del mismo animal frente a xenotrasplantes o alotrasplantes.

Además, tanto el xenotransplante como el alotransplante provocan una respuesta inmune inflamatoria y un deterioro funcional mayor de la retina, que los trasplantes singénicos, que resultaron los más seguros. También estudiaron el alotrasplante con inmunosupresión para recrear la situación en la clínica, observándose que la inmunosupresión no rescataba las alteraciones anatómicas o funcionales producidas por el alotrasplante.

“Como dicta la lógica, nuestros datos muestran que los trasplantes singénicos son los menos dañinos”, dice María Norte-Muñoz, primera autora de este trabajo y que recientemente ha defendido su tesis doctoral.

Los investigadores de este trabajo recientemente demostraron en otro estudio publicado en Frontiers in Cell and Developmental Biology que los trasplantes singénicos de estas mismas células son los únicos capaces de prevenir la muerte de una población neuronal de la retina e inducir la regeneración de sus axones.

Proyección futura

Así, estos estudios han demostrado que el trasplante de MSC en el sistema nervioso central no es tan inocuo como se ha descrito anteriormente en la literatura científica, sino que, en función del grado de compatibilidad genética entre las células del donante y el receptor del trasplante, el efecto terapéutico observado puede variar en gran medida. “Estos aspectos deben ser considerados en el futuro a la hora de elegir al donante más idóneo, ya que hay que asegurar no solamente la eficacia sino la seguridad del trasplante”, concluye Marta Agudo Barriuso.

Estos hallazgos arrojan esperanza al empleo de las terapias celulares para el tratamiento de distintas enfermedades del sistema nervioso central, para que, con un mayor conocimiento y comprensión de la compatibilidad genética entre donante y receptor, se puedan diseñar en el futuro estrategias más eficientes para prevenir las respuestas nocivas y potenciar las beneficiosas.

La profesora María Trinidad Herrero, distinguida con uno de los ‘Premios Mayores de la Región de Murcia’

La Catedrática de la Universidad de Murcia María Trinidad Herrero ha sido reconocida con uno de los ‘Premios Mayores Región de Murcia’ que que concede la Consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias, Política Social y Transparencia, y que reconocen a profesionales y entidades que han destacado en el cuidado e integración de las personas mayores en la Región. En concreto, la profesora Herrero ha sido distinguida en la categoría de Colectivo o persona física o jurídica de ámbito autonómico.

Los ‘Premios Mayores Región de Murcia’, que concede la Consejería de Mujer, Igualdad, LGTBI, Familias, Política Social y Transparencia, reconocen a profesionales y entidades que han destacado en el cuidado e integración de las personas mayores en la Región. La Consejería ha destacado la trayectoria de Herrero y su labor de fomento y sensibilización en pro de la integración de las personas mayores. Herrero es subdirectora del Instituto de Envejecimiento de la Universidad de Murcia y, desde 2021, miembro de la Real Academia Nacional de Medicina (RANM); siendo la cuarta mujer que ha conseguido un asiento en la institución.

   La vicepresidenta y consejera, Isabel Franco, presidió el acto de entrega de premios, que se celebró en el Auditorio y Centro de Congresos Víctor Villegas de Murcia.

   Franco ha felicitado a todos los premiados, sobre los que ha destacado “tanto su implicación, como la importante labor que despliegan en la sociedad con nuestros mayores, quienes deben contar siempre con la mejor de las atenciones”.

   El premio ‘Mayor del año 2022′ ha recaído en Maithe Palacín Tortosa, un referente en la Región por su dedicación a los enfermos de alzhéimer a través de la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer de la Región de Murcia (Afamur), asociación que creó ante las dificultades, insuficiencias y desconocimiento de esta enfermedad que encontró cuando su madre la contrajo.

   El premio al Colectivo o persona física o jurídica en el ámbito local ha recaído en Julia Fernández, presidenta de la Asociación de Familiares y Enfermos de Alzhéimer y de Demencias de Alcantarilla (Afade), quien entró en contacto con la enfermedad cuando su madre comenzó a sufrirla. Asimismo, trabaja activamente para que el Alzhéimer sea diagnosticado lo antes posible y promueve desde la asociación el bienestar tanto de los enfermos como de los familiares y de sus cuidadores.

   Por su parte, el centro de día ‘Mimo’ ha obtenido el premio a la Entidad gestora pública o privada. Destaca por su actuación innovadora basada en un modelo de atención centrado en la persona con el objetivo de aumentar la autonomía de las personas mayores dando apoyo a sus familias y cuidadores.

   Otra premiada ha sido María Planillas por su destacada labor de fomento y sensibilización en pro de la cultura, el deporte y el entretenimiento dirigido a las personas mayores. Conocida como ‘la Marujica del baile’, es un activo del centro social de Personas Mayores Murcia II, donde lleva más de diez temporadas impartiendo talleres de castañuelas y bailes regionales.

   El reconocimiento a la entidad u organización destacada por su Responsabilidad Corporativa para resaltar la labor en el desarrollo de los cuidados orientados a personas mayores ha quedado desierto al no haberse recibido ninguna candidatura.