Pedro Cano

Taller abierto “El viaje pintado” con Pedro Cano

Con la conferencia El viaje pintado, que impartirá Pedro Cano, continúa el ciclo de lecciones magistrales de algunos de nuestros Doctores Honoris Causa, que con motivo del centenario de la Universidad de Murcia tendremos el honor de tener de nuevo en la que es su casa.

Cartel viaje
Nacido en Blanca, Pedro Cano desde pequeño trabaja muy intensamente, sobre todo haciendo grandes paisajes. Estudia en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, bajo la guía de Antonio López, Juan Barjola y Rafael Martínez Díaz. En 1968 realiza su primera visita a Italia y un año después gana el Prix de Rome en la Academia de España en Roma, donde reside durante tres años. Viaja incansablemente por Europa y encuentra un constante punto de referencia en Grecia, donde a menudo regresa. Viajero por vocación, en 1976 atraviesa América Latina y desde 1984 pasa cinco años en Nueva York.

Es Doctor Honoris Causa por la Universidad de Murcia, Hijo predilecto de Blanca y Cittadino Onorario de Anguillara Sabazia, Fabriano y Ragusa, además de Académico de número de la Real Academia de Bellas Artes de Murcia y miembro de la Academia Pontificia de los Virtuosos del Panteón de Roma. Ha recibido, entre otros reconocimientos, la Encomienda de Número de Isabel la Católica.

Entre sus obras, presentes en colecciones privadas y museos de todo el mundo, destacamos una gran tela expuesta en los Museos Vaticanos y el autorretrato expuesto en el Corredor Vasariano de la Galería de los Uffizi. En 2010 se inaugura en Blanca la Fundación Pedro Cano, que acoge en un recorrido museístico unas dos mil obras del autor.

Compagina su residencia en nuestra región con sus largas estancias en Roma. Relatar su vida es describir sus viajes ya que un tercio del año este pintor de la luz lo saborea viajando. Con la conferencia El viaje pintado, Pedro Cano nos presenta los frutos de estos viajes: sus cuadernos de viaje. A través de ellos, sus palabras y sus pinceles nos cuentan los lugares donde su mirada, esa mirada transparente, es capturada por la luz. Escucharle es compartir esos paisajes iluminados, apasionarnos por la poesía de sus colores y el frescor de su acuarela.