“El mío es un programa de cuatro años, no de ocho” (Rector José Orihuela)

“Más años de recortes serían el fin para la Universidad de Murcia”,

Las citas y las visitas se le agolpan en la agenda. A sólo tres semanas de haber tomado posesión como el principal cargo de la Universidad de Murcia, José Orihuela confiesa sentir todavía cierta extrañeza cuando la gente le llama Rector.

Según el Rector: "La Universidad no puede asumir ningún recorte más". Foto: Luis Urbina.
Según el Rector: “La Universidad no puede asumir ningún recorte más”. Foto: Luis Urbina.

Confiesa que continúa aprendiendo cosas de la Universidad de Murcia –“es muy grande, y se hacen muchísimas cosas”-, y dice estar seguro de que la ilusión por mejorar la institución, permanecerá incólume en él cuando acabe su mandato. Un mandato, por cierto, en el que no desea estar más que lo imprescindible para poner en marcha su programa de innovaciones: -“el mío es un programa de cuatro años, no de ocho”-.

José Orihuela, undécimo Rector de la Universidad de Murcia en sus 99 años de existencia –décimo tercero si contamos los Comisarios Regios de sus comienzos-, asegura estar ilusionado y sentirse fuerte para acometer la difícil tarea que le espera: asumir el mando de este centro casi centenario en unos momentos de crisis económica y recortes a los que espera hacer frente de la mejor manera para que la nave universitaria sufra los menores vaivenes posibles.

El Rector José Orihuela, en su despacho, momentos antes de la entrevista. Foto: Luis Urbina.
El Rector José Orihuela, en su despacho, momentos antes de la entrevista. Foto: Luis Urbina.

Junto a los temidos recortes, está decidido a combatir otros males que juzga tan perniciosos como estos: la burocracia y la desesperanza. El antídoto: ilusión y medidas razonables.

José Orihuela, que pone énfasis en la excelente sintonía en la que se halla con el Presidente de la Comunidad Autónoma Alberto Garre, comenta sus planes para los próximos cuatro años y habla de algunas de las principales medidas que quiere llevar a cabo en la Universidad de Murcia.

-P: Rector José Orihuela. ¿Le suena ya más familiar, le ha dado tiempo a habituarse?

-R: Todavía no. Me he dado cuenta de la cantidad de personas que ahora utilizan la palabra Rector para referirse a mí. En lugar de llamarme Pepe, como me habían llamado antes, o José Orihuela, o profesor, como también me han llamado muchísimas veces. Me hace mucha gracia que me llamen Rector, y aún no me he habituado, desde luego.

Un momento de la entrevista. Foto: Luis Urbina.
Un momento de la entrevista. Foto: Luis Urbina.

-P: A poco más de tres semanas de su toma de posesión, ¿Ha  cambiado en algo su concepción de la Universidad de Murcia tras el encuentro con la realidad?

-R: En absoluto. La universidad es algo muy complejo, y todavía no tengo de ella un conocimiento al detalle, pero después de estas semanas puedo decir que no ha cambiado mi forma de pensar respecto a ella. Tras estos días, simplemente he podido contrastar cosas que no tenía claras, pero no ha cambiado en nada. Lo que ocurre es que todavía estoy aterrizando, sigo recopilando información, porque la universidad es muy grande. Hacemos muchísimas cosas… (aquí hace un alto, reflexionando sobre sus propias palabras, como quien se detiene sobre sus pasos, y dice al cronista con un poso de intimidad, como si fuera para sí): Ya he comenzado a hablar institucionalmente, he dicho hacemos, como si fuese yo quien las hace, o sea, que ya estoy empezando a saber  hacerlo (se ríe).

-P: Comienza su mandato en un momento en el que sufrimos una severa crisis que ha afectado extremadamente a la enseñanza. ¿Cómo repercutirá esto en su forma de gobernar?

-R: Va a afectar muchísimo, nadie se puede aislar del entorno. Y el entorno económico condiciona absolutamente todo. Sin duda la situación económica va a condicionar muchísimo lo que podamos hacer. No sólo va a condicionar nuestra forma de actuar, sino que ya lo ha hecho anteriormente, obligando a hacer políticas de contención de gasto, y probablemente tendremos que seguir haciéndolas durante un tiempo, dado que estamos estancados.  Sin duda, todo eso tiene que ver con la política que haya que desarrollar.

-P: Es difícil pensar que los presupuestos de la Universidad de Murcia vayan a subir, pero ¿podría asumir la Universidad de Murcia nuevos recortes?

-R: No, no, no –tres rotundas negaciones que darían la impresión al cronista de que estamos en una situación bíblica si no fuese porque el entorno indica claramente que nos encontramos en el despacho del nuevo Rector de la Universidad de Murcia-, la universidad no puede asumir ningún recorte más. Un estudio realizado por el equipo anterior, presentado en diciembre de 2013 en el Claustro, hace una extrapolación de lo que sucedería a la Universidad de Murcia si en 2015 y 2016, se continuara con la política de recortes actualmente existente, y el informe concluye que la Universidad de Murcia no lo podría asumir durante dos años más, eso sería su fin.

Hace unos días fui a visitar por primera vez al presidente de la Comunidad Autónoma, Alberto Garre, y le entregué ese informe, subrayándole la página 28, donde se especifica lo que pasaría con la Universidad de Murcia si se continúa con la política de recortes.

Creo que no va a haber mas recortes, y así me lo han transmitido. En todo caso, ya comenté que hay una línea roja que no se puede traspasar: que los salarios estén por debajo de la subvención. Mientras sea así, no podemos hacer absolutamente nada. El presidente se comprometió a revisar esta cuestión, y yo creo que para una primera visita es más que suficiente y resulta positivo.

El Rector afirma que mantiene una total sintonía con el Presidente Garre. Foto: Luis Urbina.
El Rector afirma que mantiene una total sintonía con el Presidente Garre. Foto: Luis Urbina.

-P: ¿De qué otras cosas trató con el Presidente Garre?

-R: En esa cita le puse sobre la mesa al Presidente un segundo asunto que también considero de importancia vital para la Universidad de Murcia: el análisis detallado de la inversión que se ha hecho en el campus de Ciencias la Salud y la absoluta  prioridad de los aularios para que podamos trasladar allí Medicina y abrir el Centro de Investigación Biomédica. Sin ese aulario no se puede abrir ese centro de investigaciones. Para ello habría que captar fondos Feder. El momento de realizar esta captación se ha producido justo cuando se da una transición de poderes, por lo que no ha existido una negociación directa con nosotros, y yo considero que se ha incluido una cifra pequeña para lo que cuesta el aulario. Estamos intentando negociar con la Comunidad Autónoma para que aumente la cifra, y ahora mismo permanecemos a la espera de la respuesta.

El presidente fue muy positivo en esa conversación. En este sentido, tengo que decir que la sensación que tengo es que desde la Comunidad Autónoma, al igual que desde la Universidad de Murcia, se es consciente de que esta empresa es muy importante para la Región.

Yo creo que vamos a ir hacia adelante, revirtiendo, la situación dramática que sufren los colectivos de la universidad, aunque sea de una manera más lenta de lo que nos gustaría.

En cualquier caso, desde aquí afirmo que lo primero que voy a intentar hacer es revertir dos cosas: por un lado la cuestión del PAS interino, y por otro el hecho de acudir solamente a plazas de asociados para cubrir las plazas de docencia. Hemos de empezar ya una política encaminada a convertirlas en plazas normales y no en plazas de asociados. Esos dos asuntos son prioritarios bajo nuestro punto de vista.

R: Eso supondría un incremento en el presupuesto…

-R: Indudablemente. Por esa causa, para ver con detalle como se hace todo esto, tengo que saber a ciencia cierta dónde estamos. Y aquí entra el tema sobre el que se ha vertido tanta tinta, yo pienso que de manera exagerada: la auditoría, que ya esta en marcha. Lo que hemos hecho ha sido, con la misma consultoría que está realizando en la Universidad de Murcia las auditorías anuales, solicitarle un informe a fecha 20 de mayo, el día que tomamos posesión. Se trata de conocer cómo estaba este sistema dinámico que es el presupuesto cuando entró el nuevo equipo, para saber qué margen tenemos de aquí a diciembre 2014, qué tenemos que negociar con la Comunidad Autónoma de cara al largo plazo…

Esta fue precisamente otra de las cosas que le dije al Presidente: nosotros no deberíamos hacer una negociación año a año, sino por períodos plurianuales. Me gustaría que eso se hiciera con las dos universidades públicas, que se establezca un margen más amplio, como ya se hizo en el período 2007-2011. Deberíamos conseguir que en un periodo corto de tiempo se establezca ese margen plurianual, donde, aunque sea en capítulos concretos, podamos empezar a negociar con márgenes de tiempo más amplio porque tengamos ya clara una hoja de ruta de varios años. Haciéndolo de este modo, sabríamos lo que se puede gastar un año y al siguiente, y también cómo movernos internamente para priorizar los gastos y establecer cuáles son los principales, pero mientras ese estudio no esté no sabremos de donde partimos. Desde esta empresa me han pedido tres semanas, yo les he pedido que lo hagan en dos. Ya veremos.

Según el Rector: "No tiene nada de extraño que yo iptimice el equipo una vez ganadas las elecciones". Foto: Luis urbina
Según el Rector: “No tiene nada de extraño que yo iptimice el equipo una vez ganadas las elecciones”. Foto: Luis urbina

-P: Se deduce de todo lo que dice que la sintonía con el Presidente de la Comunidad Autónoma es buena. Quizás también tenga que ver que ambos son unos recién llegados a sus respectivos cargos.

-R: Es total, estamos en total sintonía. Es cierto que ambos somos nuevos, y de eso hablamos también: somos equipos nuevos, recién aterrizados. El de Garre, de momento es un equipo de transición, no se puede saber qué va a deparar el futuro. Quizás por eso yo pienso que es un buen momento para hacer política. Nosotros, política universitaria, que es lo nuestro, y ellos el resto de la política. Creo que esta convivencia que se vislumbra va a ser buena. Y así lo espero.

-P: Aseguró nada más llegar al Rectorado que la burocracia y la desesperanza son dos de los grandes retos con los que se iba a enfrentar, ¿Cómo va a luchar con eso?

-R: Contra la burocracia hemos empezado a luchar ya. Hemos comenzado a introducir un sistema de gestión que estamos probando primero entre nosotros, el equipo de gobierno.  Las reuniones del Consejo de Dirección se han reorganizado de manera que sean muy ejecutivas, que vayan a una agenda claramente priorizada que remarca lo importante. Vamos a intentar que así se revierta la burocracia actual. Y un logro muy importante en este sentido será que en el Consejo de Gobierno, compuesto por 50 personas, podamos utilizarlo. Si lo conseguimos, tendrá un impacto importante en la reducción de la burocracia.

Una vez que veamos que funciona bien, esta experiencia la vamos a llevar a otros ámbitos, pues existen servicios que ya nos han comunicado que están interesados.

-P: ¿Y la desesperanza?

-R: La desesperanza la combatiremos tratando de transmitir ilusión en todo lo que hagamos.

Yo intento transmitir ilusión siempre, porque la tengo. Tengo ilusión por cambiar pequeñas y grandes cosas. Es un reto difícil, y sé que nos encontraremos con dificultades. Y cuando ocurra lo contaremos, pero intentando que esa ilusión no acabe nunca. Siempre he sido muy optimista, y no creo que cambie a estas alturas.

-P: Cuando llegó al rectorado, cambió varios vicerrectorados, ¿qué le llevo a eso?

-R: Algo muy sencillo: lo hice, sobre todo, porque había habido cuatro candidaturas. Hubo cuatro apuestas diferentes de equipos de gobierno,  y posiblemente todas muy válidas. La Universidad de Murcia tiene mucho profesorado y mucho PAS haciendo cosas importantes. Y cuando se presentan cuatro opciones de equipos de gobierno, las posibilidades de cada uno quedan limitadas, hay gente excelente que se queda fuera cuando sólo gana una.

Comprobamos que las cuatro candidaturas tenían mucho respaldo, y hemos intentado que el equipo que hemos formado sea lo mejor, lo más óptimo posible. Pero no tiene nada de extraño que yo optimice el equipo una vez ganadas las elecciones. Creo que la mayoría de la gente está contenta, porque hemos ganado incorporando personas muy eficientes, de mi confianza, qué mejor que reforzar un equipo de esa manera. Creo que con las elecciones que ha habido, podía hacerlo.

Habrá quien critique que existan en el nuevo equipo muchos matemáticos, hay tres, pero yo me considero con las manos libres para hacer esto. Lo que hay que hacer es rendir cuentas de lo que se hace después.

Además, yo tuve un percance poco después de mi elección, que me ayudó mucho a pensar. El tres de mayo tuve una caída que me obligó a estar en posición horizontal y mirando al techo dos días enteros. Me dijeron que tenía que estar así dos meses, algo que afortunadamente no se cumplió. Y todo esto influyó en mi decisión.

-P: Un periodo de reflexión forzado que fue finalmente positivo ¿no?

-R: Sin duda, pienso que lo fue.

-P: Una de las cosas que hizo cuando decidió presentar su candidatura a Rector, fue firmar ante notario su compromiso de no presentarse a cargo alguno hasta al menos tres años posteriores a su nombramiento. ¿Qué le indujo a hacerlo?

-R: Presentar una candidatura puramente académica. Que todos vieran que lo que nos interesa es la universidad, que somos universitarios y trabajamos para la universidad por encima de cualquier otra cuestión. Era un modo de decir: esto es un sillón, pero yo no voy a estar aquí sentado nada más que lo imprescindible para llevar adelante ideas que creo que hay que llevar a cabo. Y que cuando eso esté hecho yo ya no tengo que hacer nada más, y volveré a mi trabajo, a lo que he hecho toda mi vida: dar clase e investigar.

Quería remarcar que a los miembros del equipo rectoral no nos mueve ninguna cuestión de política fuera de lo que es estrictamente universidad. Quería mostrarle a la sociedad una forma de comportamiento basada en el conocimiento, y hacerlo académicamente.

-P: Hace unos días, hizo algo que no recuerdo que haya hecho ningún Rector: se presentó en las pruebas de Selectividad. ¿Qué les dijo a los alumnos?

-R: Hace muchos años, cuando fui vicerrector, organizamos un sistema distinto para realizar las pruebas de selectividad, y ese sistema ha ido funcionando como un reloj, y quería comprobarlo personalmente.

Fui porque a los alumnos hay que transmitirles la idea de cercanía, que la universidad no es un ente lejano, que los estamos esperando. Y así se lo dije a todos: que los esperaba en septiembre. Pero entonces hubo un clamor de nerviosismo, porque creían que les estaba diciendo que los esperaba en septiembre para examinarse otra vez, y tuve que aclararlo (risas). “No, no, os espero en septiembre en algunas de las titulaciones que ofertamos porque sin vosotros no somos nada,  así que venid a la Universidad”.

-P: Uno de los más firmes apoyos de su candidatura fueron los alumnos.

-R: Digamos que al alumnado le parecieron mayoritariamente buenas las propuestas que yo llevaba en mi proyecto.

-P: La candidatura apoyaba la implantación de unas tasas universitarias progresivas.

-R: Dijimos que ante la subida de tasas teníamos que forjar una tasa progresiva. Aunque eso de tasa progresiva no es correcto, pero es así como se entiende. Ante subidas como las de los últimos años, hemos de analizar una evolución progresiva de las posibilidades de cada alumno y del entorno familiar. Afortunadamente, parece que este año no van a subir las tasas, sino que se mantendrán. Esa es la propuesta, y no está mal porque supone romper la tónica de subidas, pero nos parece que teníamos que volver a cómo eran las tasas antes, y por eso vamos a luchar. No sé si lo conseguiremos, porque los precios los pone la Consejería, pero vamos a intentarlo.

-P: Hay cierta polémica con los exámenes de Septiembre, que ahora han pasado a julio.

-R: A los estudiantes les preocupa  todos los exámenes: los de septiembre, los de junio… En la campaña dijimos que los centros que agrupados en su división tuvieran esta problemática con los exámenes, trataríamos de canalizarlos para hacer las pruebas en septiembre. Lo vamos a estudiar, porque hay sitios donde los Trabajos Fin de Grado colapsan el centro de tal manera que es imposible hacerlo todos, y es mejor pasarlos a septiembre como estaban, eso en determinados sitios, y hacerlo con las divisiones y con la estructura que le queremos dar, pero no podemos hacerlo de inmediato, analizaremos ese problema.

-P: ¿Cómo se canalizarán las relaciones con los alumnos?

-R: Intentaremos tratar con ellos la mayor cantidad de políticas que tengan relación con ellos, recoger la mayor información necesaria para arreglar todos los problemas que subyacen, que son muchos. Vamos a ver si canalizamos bien con sus representantes todos esos temas. En este sentido, el Vicerrector de Estudiantes tiene un papel muy importante para afrontar y solucionar los problemas de forma inmediata.

-P: ¿Qué le parece el hecho de que sea necesario un 5’5 de nota para obtener exención de tasas de matrícula y 6’5 para una beca?

-R: Yo creo que se trata de un problema a nivel nacional. El 6,5 es una barbaridad, un cinco es un cinco, y todo el mundo sabe que un cinco es un aprobado. Me parece una aventura desmedida por parte del ministerio.

Por otro lado está el tema de préstamos sin interés. El sistema de préstamos sin interés es una medida muy positiva, pero no si se sustituye a las becas, sino para complementarlas.

Esa es mi opinión al respecto, y eso es lo que defenderé en la primera reunión que tenga en Madrid.

-P: ¿Cuáles son las mayores carencias que tiene en estos momentos el profesorado?

-R: Lo primero que queremos hacer es tratar el tema de los asociados, intentar transformar esa masa de asociados que han entrado en los últimos años, reconvirtiéndolos poco a poco en plazas de profesor ayudante para que puedan ir siendo la savia nueva que produzca la renovación. Reduciremos de ese modo el desgaste por la ruptura de la edad del profesorado que se esta produciendo por la tasa del 10% de reposición. Y la única forma de levantar ese lastre es introducir plazas por abajo, y eso lo haremos de manera inmediata y cuando el dinero nos lo permita. Eso será una acción prioritaria.

-P: ¿Y con respecto al PAS?

-R: Uno de los temas prioritarios en el PAS es el tema de los interinos. Hay que intentar que los interinos regresen a la situación anterior. Que la gente cobre todas sus horas, en lugar de esta situación a la que se nos forzado por la crisis. Las cosas que han sido forzadas por la crisis, hay que ir revirtiéndolas poco a poco.

-P: ¿Qué hay de esa Universidad abierta que ustedes defendían?

-R: El verano ya está aquí, así que tenemos poca capacidad de maniobra. Este verano vamos encaminados a la situación que ya estaba prevista, y habrá cierre de edificios, pero en navidades y semana santa no vamos a cerrar, y vamos a tener una universidad abierta en la mayoría de los servicios. Obviamente habrá sitios que no tendrán que abrirse, porque simplemente no habrá actividad, pero los que la tengan estarán abiertos.

-P: ¿Aspira a una segunda legislatura? O dicho de otro modo: ¿piensa que todo lo que se ha propuesto hacer necesita de ocho años para conseguirlo o será suficiente con cuatro?

-R: Todo lo que nos hemos propuesto hacer lo podremos hacer en cuatro años, no creo que necesitemos ocho para llevarlo a cabo. El mío es un programa de cuatro años, no de ocho. No voy a estar sentado en el sillón nada más que lo imprescindible para llevar adelante ideas que creo que hay que llevar a cabo.

-P: Un deseo para estos cuatro años que empiezan ahora.

-R: Mi deseo es que encaje bien la Comunidad Autónoma, que es fundamental para la financiación; que encaje bien el plan de financiación a lo largo de los cuatro o seis años que consigamos; que encaje bien el plan de organización departamental que sustituye al plan de organización docente, y que encaje bien el sistema de objetivos que planteamos en el PAS para que éste  pueda progresar y hacer su carrera también; que se pueda establecer una igualdad entre los estamentos universitarios a nivel de trabajo; y que consigamos que los alumnos puedan estudiar, quiero que los estudiantes tengan tiempo para  estudiar, hay que conseguir tiempo de estudio para ellos

En primera persona

La universidad no puede asumir ningún recorte más.

Sin duda la situación económica va a condicionar muchísimo lo que podamos hacer.

Desde la Comunidad Autónoma, se es consciente de que la Universidad de Murcia es muy importante para la región.

Contra la burocracia hemos empezado a luchar ya.

Combatiremos la desesperanza tratando de transmitir ilusión en todo lo que hagamos.

No tiene nada de extraño que yo optimice el equipo una vez ganadas las elecciones.

A los miembros del equipo rectoral no nos mueve ninguna cuestión política fuera de lo que es estrictamente universidad.

Quiero que los estudiantes tengan tiempo para  estudiar hay que conseguir tiempo de estudio para ellos.

No voy a estar sentado en este sillón nada más que lo imprescindible para llevar adelante ideas que creo que hay que llevar a cabo.