Cuando nos referimos a la contaminación, pensamos en la atmosférica, e incluso la acústica, pero normalmente no reflexionamos sobre la que tratamos hoy, la lumínica; que se refiere a la emisión de luz artificial en intensidades, direcciones u horarios innecesarios para la actividad humana.
Podemos pensar que no es un problema que afecta a la ciudadanía, sólo a los astrónomos, porque el exceso de luz dificulta su trabajo; sin embargo, esa contaminación está muy relacionada con factores que influyen sobre nosotros de algún u otro modo, como la crisis energética, el cambio climático, la disminución de la biodiversidad….
Si miramos una imagen de satélite con las zonas más iluminadas del planeta, veremos que ciudades como Madrid y Barcelona, junto a la zona del levante, se encuentran entre las más iluminadas del mundo.
Gasto económico
Para que entendamos mejor cómo nos afecta la contaminación lumínica vamos a comenzar hablando del gasto energético que hacemos en España. En concreto, realizamos el doble de gasto por habitante que Alemania. Además, el consumo eléctrico de alumbrado público es un 80 por ciento mayor al que se creía hasta 2009.
Asimismo, según expertos consultados en el programa, todos los estudios indican que la mitad del gasto en alumbrado se podría eliminar. En el año 2007 era de 450 millones de euros, aunque ahora se estima que rondaría los 830 millones de euros anuales.
Por otra parte, informamos de que la Región de Murcia es posiblemente la cuarta comunidad española en gasto en iluminación.
Efectos en la salud de los ciudadanos
El ser humano ha provocado numerosos cambios en el medio ambiente y uno es que ha conseguido desaparecer la noche en ciertas zonas del mundo, sobre todo en las grandes ciudades, pero ¿cómo influye la contaminación lumínica en nuestra salud? Lo haría sobre todo en nuestro ritmo biológico porque nuestro organismo está preparado para estar activo durante el día y para dormir de noche, cuando no hay luz. El exceso de iluminación afecta al sistema circadiano, nuestro reloj biológico, que es el que organiza las funciones fisiológicas de nuestro organismo.
Si ese ese reloj biológico se altera se produce una cronodisrupción, es decir, se altera el orden temporal de nuestro cuerpo, lo que está asociado a enfermedades, como algunos tipos de cáncer, alteraciones del sueño, etc.
Por lo tanto, esos cambios, afectan a la biodiversidad y las especies, que durante años han estado adaptadas a un patrón regular de luz – oscuridad y ahora se están viendo afectadas por estos cambios en mayor o menor medida.
La descontaminación lumínica
Te lanzamos otra pregunta, ¿qué podemos hacer para eliminar la contaminación lumínica? Ahora ha surgido otro concepto, la descontaminación lumínica, que sería iluminar correctamente aquellos espacios, por ejemplo, utilizando faroles que proyecten la luz hacia abajo y no hacia el cielo.
En Reus se comenzó un proyecto de descontaminación, sobre todo en el centro, con el que se consiguió ahorrar un 65 por ciento del gasto en alumbrado público, según el técnico consultado.
Por otra parte, en Murcia, se desarrollan actividades para concienciar a la ciudadanía sobre la contaminación lumínica. Además, en el Museo de la Ciencia y el Agua de Murcia puedes visitar la exposición Contaminación Lumínica, el lado oscuro de la luz. También han organizado varias charlas, algunas de ellas las darán los científicos entrevistados en este programa. Tienes más información en www.cienciayagua.org.