Poco podía imaginar José Luis Pardos, en aquel lejano 13 de junio de 1988, cuando, siendo Embajador de España en Australia, ayudó al rey Don Juan Carlos a enviar su primer mensaje por correo electrónico desde Canberra a través de Internet, que aquella incipiente Red de redes acabaría convirtiéndose en el instrumento de comunicación más poderoso del mundo, erigiéndose en el artífice de la de mayor revolución tecnológica que se ha conocido.
Este murciano de vocación universal nunca ha estado desvinculado de su tierra y de su Universidad, la de Murcia, por más que haya desempeñado labores de embajador en lugares tan distintos y distantes como Australia, Nueva Zelanda, Canadá o Dinamarca.

Hace dos años celebró, junto a otra treintena de antiguos compañeros, el cincuenta aniversario de su Ingreso en nuestra facultad de Derecho, y hoy, en su calidad de Embajador en misión especial para las Nuevas Tecnologías, es uno de los máximos impulsores de algunas de las iniciativas más novedosas y de mayor ambición en el terreno de la comunicación. Una de ellas es el programa UNITeS, que, auspiciado por Naciones Unidas, pretende acabar con la brecha digital abierta entre los países del primer y el tercer mundo con la incorporación de voluntarios murcianos expertos en informática que contribuirán a paliar sus deficiencias.

-Pregunta: ¿Qué hace un diplomático como usted en un sitio como internet?

-Respuesta: Yo creo que todos los diplomáticos estamos o deberíamos estar ya en la Internet.

-P: Pero no al nivel al que está usted.
-R: Lo que ocurre es que he tenido mucha suerte. Entre 1987 y 1992 fui embajador en Australia y Nueva Zelanda, que era países muy dedicados a los componentes del hardware para la informática. Durante la visita oficial a Australia de sus Majestades los Reyes, en 1988, para promocionar la Expo y los Juegos Olímpicos del 92 en España, tuve la oportunidad de ponerle a SM. el Rey el primer correo electrónico con nuestro Pais y lo inauguró él precisamente.
Entre 1992 y 1996 estuve como embajador en Canadá. Durante ese período se produjo lo que se llamó Guerra del Fletán. Yo fui el Embajador que manejo aquel “cotarro” y que sacó en tres días el ESTAI, aquel barco gallego pirateado en alta mar por las autoridades Canadienses. En aquellos dias aparecían las primeras Redes cívicas de trabajo en la Internet, y yo estuve en una de ellas. Además, tuve la oportunidad de conocer a los pioneros de la Internet en Canadá, (algunos de ellos ya han visitado muchas veces nuestra Universidad y nuestra región de Murcia) y me ayudaron muchísimo durante y después de aquel conflicto. El Ministro de pesca candiense Mr. Tobin, (Vide mi pagina personal www.sispain.org/~pardos, sector fisheries) difundió unas fotografías distorsionadas de los peces que nuestros marineros gallegos pescaban, y yo le contesté, convirtiendo a HTML y en muy pocos días, todo aquel Programa “Sí Spain” de aquella primera Red situada en la LAN del NCF (National Capital Frente) desde los inicios del 92 y en la que me integré desde mi llegada a Ottawa. Así y con la ayuda de la Universidad de Carleton, en concreto de su Facultad de Ingenieria y en menos de 3 dias reconvertimos todo nuestro Programa al recien inaugurado WWW. Fue la Embajada de España en Canadá la primera que tuvo una web en le mundo. Y que continúa hoy con mucho empuje, este programa casi diez años después. Vide www.sispain.org
En Canadá tuve la oportunidad de conocer a gente estupenda en la Universidad de Toronto, en Vancouver, en Montreal, en Québec, en Ottawa…y Ottawa era la ciudad que más importancia digital tenía en Canadá, y por lo tanto en el mundo, porque Canadá era entonces y sigue estando hoy en la vanguardia digital del Mundo.
Aquello me vinculó ya definitivamente a la Internet. Pero a continuación en 1996 pasé como Embajador en Dinamarca y en Lituania. En mi país danés de residencia, son ya casi un 75 % de sus habitantes los que están en la Red, por lo que mi relación continuó creciendo.
Hace ya cinco años tuve el gusto de establecer desde mi Cancillería en Copenhague el primer sistema de Videoconferencia y lo inauguramos precisamente con la Universidad de Murcia. Lo hicimos con el actual rector, José Ballesta y el entonces Consejero Antonio Gómez Fayren.
Primer correo electrónico en Australia, primer web y primera videoconferencia. Podemos decir que Internet me ha tocado.

-P: ¿Cómo se compatibiliza diplomacia y nuevas tecnologías?
-R: Estando yo en Dinamarca, la Internet Society, que era la ONG creada por y en donde estaban los padres de Internet, Vington G. Cerf, Bob Kahn, (creadores del Protocolo IP/TCP) Larry Roberts, (autor de la ARPANET en aquellos legendarios años 60’) o Ted Lees (padre del WWW) que recibieron el premio Príncipe de Asturias a las Comunicaciones el pasado año en Oviedo, me eligieron miembro de su Consejo de Dirección. En esa época tuve la suerte de poder participar muchas veces al año y tanto en Asia, América y Europa en sus Reuniones periódicas de formación (INET’s) y semestralmente en Washington DC. en el Consejo de Dirección (Board of Trustees del ISOC) de esta Organización pionera en la Internet y eso supuso ya el baño mas profundo de mi relación con la Internet, sus tecnologías y sus connotaciones sociales, culturales y económicas. Yo creo que la experiencia que uno tiene, fruto de los años que ha acumulado, la tiene que utilizar, y debo dedicarme especialmente a mi tierra y a mi Universidad murcianas. Eso es lo que estoy haciendo.

-P: Hábleme del programa UNITes.
-R: Nosotros venimos trabajando con la Universidad desde hace mucho tiempo. La Universidad de Murcia tiene un producto excelente: la tarjeta inteligente, el MUScard (Murcia University Smart Card). Se trata de un producto de excelencia, que desarrolla el Departamento del ATICA de la Universidad y que debe ir mucho más allá de la Universidad, porque sus aplicaciones pueden acarrear enormes repercusiones sociales en muchos sectores como el de los Mayores, las Empresa o el de la Discapacidad, por no citar mas que unos pocos.
El pasado mes de noviembre, el presidente Valcárcel convocó una reunión en el palacio de San Esteban en la que estaban los tres pies que dice mi maestro Mario Bunge que hay que mover siempre: la política, la cultura –el mundo universitario, representado por el Rector y distintos Vicerrectores- y la economía o el de los empresarios. Fue allí, el 12 de noviembre de 2002, donde hicimos un lanzamiento de programas internacionales digitales para la Región de Murcia. Y hubo una especial participación del Grupo de expertos digitales, al que pertenezco, del B&W que recoge las personas que he ido conociendo por el mundo, ya amigos y mas que digitales que tienen un enorme potencial de trabajo y de aplicaciones practicas de la Internet del Siglo XXI
El programa UNITes es un programa de Naciones Unidas que fue presentado personalmente por su secretario General, Koffi Annan, y tiene su organización administrativa en Bonn. Ayer precisamente –26 de mayo- tuvimos una reunión entre la Universidad y diversas personalidades en el palacio de San Esteban para ver como empezábamos a montar este programa para el año próximo.
El programa UNITes intenta establecer un sistema de cooperación con voluntarios para el desarrollo digital y prepararlos para tener una presencia física en los países en desarrollo que más interesan a la Región de Murcia, países como Túnez, Argelia, Marruecos o América Latina
Yo creo que el programa UNITes, es una iniciativa que interesa a nuestra Región, que interesa al Gobierno y que puede interesar a los empresarios de Murcia, porque lo que se aprovecha y aplica es el perfil internacional de excelencia de la Internet, como plataforma de nuestra Región de Murcia, de sus productos de excelencia y de su buen hacer en la sociedad y en la cultura.

-P: ¿Cuáles serán las primeras actuaciones en este sentido?
-R: Empezaremos con 60 voluntarios. Necesitamos un período de formación digital de los voluntarios que irá desde comienzos de curso hasta final de año. Los voluntarios formados digitalmente elegirán un país y un área de necesidades humanas básicas (Entorno, Salud, Eduacioón, Agricultura, Industrias y Servicios) para cooperar al desarrollo digital y hacerlo tambien físicamente durante un período de unos seis meses. Porque hay que tener en cuenta que no se puede trabajar sólo en Red, hay que tener presencia física también. Una vez allí, ellos han de establecer contactos digitales y físicos para que, a su regreso, la relación región de Murcia y cooperación al desarrollo continúe en todos esos sectores.

Montar infraestructuras, poner las escuelas en Red, montar ordenadores, enseñarles programas, enseñarles a enviar e-mails…, esas serán, en definitiva, las labores de estos voluntarios en su primera etapa.

-P: Lo que parece vislumbarse es que un país que no se conecte suficientemente a las nuevas tecnologías pertenecerá al Tercer Mundo.
-R: Eso es exactamente lo que el programa pretende paliar: la brecha digital. El que no esté en el mundo digital será como si no existiera. Queremos sellar esa brecha digital con grupos de voluntarios y crear un entorno para que los países en vías de desarrollo entren en las nuevas tecnologías.

-P: ¿Qué es en definitiva lo que consigue internet?
-R: Lo que hace es comunicarnos más fácilmente. Es un elemento y un modo de comunicación realmente espectacular: permite la comunicación a un incremento de velocidad muy considerable, casi instantáneo, se puede enviar a mucha gente al mismo tiempo, y además, todo queda por escrito. Es lo que se llama la arborescencia de la comunicación en Red. Se trata de un nuevo sistema de comunicaciones que puede tener un enorme impacto socio-cultural, económico y político.

-P: En función de todos los datos que maneja y de la evolución tan abrumadora de la Internet en los últimos años, ¿Cuál es el futuro que vislumbra usted para la red de redes?
-R: Yo creo que estamos empezando a tocar los primeros impactos sociales de la Internet. Por ejemplo, en el caso de las personas mayores puede ser muy importante.

Uno de los primeros problemas de Europa es el tema de las pensiones. Internet puede jugar un papel importante entre las personas que se mueven en el entorno de los 50 años, y aun en el de los 60, si están física pero sobretodo intelectualmente hábiles.
Hay que hacer que esa población, “de vacaciones” por la jubilación y que tienen un enorme Capital social de experiencia, lo pueda aportar. Esto producirá tres beneficios: el que la persona se encuentre más activa y psíquicamente mejor; que ese capital social se emplee y por último, que la red de conexiones personales y de experiencia de cada cual no sea cortada de raíz con el llamado júbilo de la Jubilación. La Internet les daría la posibilidad de proseguir siempre esas comunicaciones.
El tema de las pensiones es un grave problema. En los años 60, cuatro personas en activo pagaban a un pensionista. En el 2000 son solo dos los que pagamos por cada pensionista y dentro de unos años, pocos eh? será uno solo el que pague a un pensionista. No salen las cuentas. Hay que encontrar medios alternativos que nos ofrecen tecnologías ya muy maduras, como es la Internet.
Este es tan sólo un caso en el que la Internet puede hacer muchas cosas, pero podría poner muchos más ejemplos. Los discapacitados, las PYMES, los jóvenes agricultores, la Medicina en casa…..etc.
Lo que está claro es que en el futuro vamos a vivir rodeados de elementos conectados a la Red. Vamos a tener tele-trabajo asistido, automóviles, casas automatizadas, trajes con sensores de temperatura … etc. Desde su casa, cualquiera podrá conectar por MODEM o por Cable con su médico y tomarse la tensión o saber como está su corazón sin tener que desplazarse. Mis cálculos son que, en unos diez o menos años, nuestro modo de hacer las cosas entrará definitivamente a través de la Internet, y además produciendo beneficios económicos, sociales y hasta puede que beneficios políticos por y a través del concepto del cyber espacio.

-P: Se habla de las muchas ventajas de internet, pero ¿Cuáles son sus zonas de sombra?
-R: Internet es como la vida misma. Hay problemas tecnológicos que son muy negativos, como el spam. También la circulación de temas como el terrorismo o la pornografía, que también están en la vida real y a los que hay que aplicar los antídotos y medicinas pertinentes. Es cierto que la tecnología, derivada como aplicaciones de la Ciencia básica tienen horizontes sin limites.

-P: Me refería sobre todo al uso recurrente, casi abusivo que se da en los más jóvenes.
-R: Es evidente que habrá que dar una educación a los niños en relación con lo que hay bueno y malo en la Internet.
Hasta ahora se pensaba que uno dejaba de aprender a partir de la adolescencia. Hoy el concepto en las mas avanzas investigaciones de las Ciencias Sociales actuales de que la adolescencia llega hasta el entorno de los 45 en la que le individuo tiene una especie de acumulación polivalente de valores que uno va aprendiendo. Hasta esa edad, la gente no acaba de aprender, pero sigue aprendiendo también como adulto, a partir del entorno de los 45 años y durante toda su vida. La capacidad de aprender es inacabable. Y eso es lo que tendríamos que difundir desde la Universidad, madre de la Investigación, de la Ciencia Basica y de sus aplicaciones técnicas. En eso creo que el establecimiento de la comunicación arborescente es muy importante. Y eso es lo que hará Internet.

-P: Usted ha conocido la Universidad de Murcia de finales de los 40, ¿Cómo encuentra nuestro centro en la actualidad?
-R: Yo me licencié en la Universidad de Murcia hace ya casi 50 años. Y volver a esta Universidad y ver los cambios que ha experimentado es una cosa tan gratificante como esperanzadora. Yo estoy mirando al futuro de esta Universidad, y junto con el Rector, el presidente del gobierno Regional y diversos sectores empresariales de la Región, estamos tratando de proyectarla al exterior a través de un producto que es esencialmente universitario como es la tarjeta inteligente de la MUSCard. Queremos conseguir que haya más comunicación entre los diversos pueblos y hemos logrado, por ejemplo que haya Ayuntamientos digitales, en embrión, como el creamos con www.Ciezanet en 1997 cuyas experiencias deben seguir ampliándose, profunbdizandose y exportándose, desde la Región de Murcia. Se trata, en definitiva, de algo propio de mi oficio: los Embajadores lo único que hacemos realmente sustancial es establecer plataformas de contactos y promover los productos de nuestros Países y de nuestras Regiones.
Gracias a la presentación que hicimos en San Esteban de los programas digitales internacionales de la región de Murcia, se ha constituido un grupo de 33 expertos de Estados Unidos, Brasil, Canadá, Suecia, Dinamarca, Alemania, Bélgica, Francia, y regiones como País Vasco, Cataluña, Andalucía y Murcia, que estamos operativos y con conocimiento de nuestra Región, al que me refería anteriormente al citar el Grupo polivalente de expertos digitales que constituye el B&W, que tiene mas de una docena de expertos Murcianos también.