“El futuro de los jóvenes es el futuro de España” (Felipe VI)
En un repleto salón de actos de la Facultad de Economía y Empresa tuvo lugar ayer la ceremonia oficial del comienzo del curso en la Universidad de Murcia número cien. Un siglo de vida que contó con la presencia del Rey Felipe VI, cuya presencia sirvió para inaugurar el curso de la Universidad española.
El profesor José Sebastián Carrión comenzó su discurso de apertura del curso del centenario de la universidad de Murcia citando “El señor de los anillos”. Bilbo, Gollum y Gandalf le dieron pie para disertar sobre “Extinciones y excepciones. El poder de la rareza en evolución”.
“En la extinción hay algo de literario: vivir es perder. Pero el registro de pérdidas deja una moraleja disponible –afirmó-, que las rarezas pueden ser material de recambio para la siguiente aventura evolutiva. El final es a veces el punto de partida, dice Eliot”.
“La historia de la vida –dijo- está preñada de fenómenos venturosos de muy baja probabilidad estadística”. Afirmó que “nuestra especie es tan anómala que ha venido a introducir un cambio sustancial en las reglas del juego planetario”, y aseguró que el ritmo actual de destrucción de biodiversidad es superior al que muestran las perturbaciones que dieron lugar a las cinco extinciones precedentes.
Aludiendo a una enfermedad neurológica que, según los manuales de medicina, le debería haber impedido “estar aquí hoy hablando”, comentó rotundo: “Somos lo que pensamos, y podemos transformarnos a través de la esperanza”.
El esfuerzo de los murcianos
“Si hoy cumplimos cien años es gracias al entusiasmo y al esfuerzo de los murcianos”. Así comenzó su discurso de la apertura del curso del centenario el Rector de la Universidad de Murcia, José Orihuela, que afirmó que es “de justicia que la universidad pública reclame recursos públicos para ejercer su función profesionalizadota. No tenemos por qué entrar en competencia con empresas privadas”, “nos jugamos –dijo- la salud social, laboral, moral e individual de nuestros hijos y nietos. No lo podemos consentir”.
El Rector hizo una defensa a ultranza de la Universidad: “Las universidades deben erigirse en lugares de inmigración del talento, puntos para el estímulo de los más capacitados y también para la profesionalización técnica, sin que ambos objetivos sean incompatibles. Necesitamos, claro, políticos inteligentes, responsables. Y políticas viables, no mecanismos de control de individuos camuflados de acciones políticas”.
Mejoras en las universidades
“El valor de un país lo da la formación y la cultura de sus habitantes”, de ahí que consideremos tan importantes las universidades, afirmó el ministro de Educación, cultura y deporte ĺñigo Méndez, que se refirió en su discurso al refuerzo de los programas Erasmus, al incremento de la tasa de reposición del profesorado al cien por cien y a un próximo decreto que regulará el título de doctor y que facilitará la movilidad internacional.
“Que la universidad nos enseñe a todos a saber vivir”, concluyó, parafraseando una frase de Saavedra Fajardo.
El presidente regional Pedro Antonio Sánchez aludió en su discurso de inauguración del curso 2015-2016 al espíritu de concordia y entendimiento con el que se fundó la Universidad de Murcia hace cien años, y citó a Saavedra Fajardo y al conde de Floridablanca, afirmando, en relación con el centenario de la Universidad de Murcia, que esta efeméride debe servir para “abrir las páginas de su historia y observar en ellas su contribución al progreso de la Región de Murcia”.
El Rey Felipe VI habló de la importancia capital de la educación y de las universidades para el futuro de España, y tuvo entrañables palabras para los jóvenes.
La institución universitaria, dijo, forma a los futuros profesionales que regirán el país, por eso debe enseñar también a convivir como ciudadanos responsables, afirmó. “Vuestro futuro es el futuro de nuestro país, el futuro de España “, dijo. Cada uno debe aportar lo mejor de sí mismo con eficacia, “colaborando todos lograremos aportar al mundo una generación más dinámica y transmisora de valores”, añadió, pronunciándose por “una universidad que derribe barreras y que contribuya a mejorar el mundo desde el saber, el conocimiento, el humanismo y la excelencia”. Para acabar con un deseo: “que la universidad siga inspirándonos a todos”.