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El pueblo de España (“El secreto de Puente viejo”), estuvo en Águilas en la Universidad del Mar  

El director y dos de sus actores exponen los secretos de la serie en una conferencia extraordinaria de Unimar

 “¡Adriana, mejórate!”. Con este deseo expresado al unísono por el centenar de asistentes a la charla-coloquio organizada por la Universidad Internacional del Mar y el Ayuntamiento de Águilas, finalizó el pasado viernes 16 de septiembre, en el salón de actos de la Casa Paco Rabal de Águilas,  la charla-coloquio “El secreto de Puente viejo, una serie de oficio”, la primera de las conferencias extraordinarias organizadas por Unimar para este mes de septiembre en distintas localidades de la Región. El mensaje iba dirigido a la actriz Adriana Torrebejano (Sol en la serie), a la que un incidente le impidió estar con el resto de sus compañeros en el coloquio.

En la presentación del acto estuvieron presentes la alcaldesa de Águilas, María del Carmen Moreno, y el vicerrector de Formación e Innovación Pedro Miralles, que tuvo un recuerdo para Paco Rabal, en cuya Casa de Cultura se celebraba el acto, y del que dijo que “Paco Rabal fue el primer actor de toda España que fue doctor Honoris Causa por una universidad española, y lo fue por la Universidad de Murcia”. Asimismo, el vicerrector agradeció al profesor Pedro Guerrero su colaboración para hacer realidad esta actividad.

Intervinieron en el coloquio Pablo Guerrero, director de la serie, y los actores Chico García (don Severo Santacruz en la serie) y Raúl Peña (don Carmelo Leal), presentes en la serie durante los últimos 500 capítulos.

576 actores, 18000 figurantes y 40 bebés

Pablo Guerrero abrió el coloquio con unos datos indicadores del enorme volumen que mueve la serie a todos los niveles. Según él, por ella han pasado 576 actores (se ha convertido en un gran semillero de intérpretes) y 18.000 figurantes, ha dado trabajo fijo a 120 personas durante cinco años y medio, y entre sus trabajadores y miembros del equipo han nacido 40 niños –“lo cual indica lo bien que nos llevamos”, indicó entre el regocijo general-.

Pero por encima de todas las cifras, dijo que “es preciso romper una lanza por estas series nuestras: es más barato comprar una serie americana, pero hacerlas en España le dan un valor añadido”.

Pablo Guerrero se refirió a la velocidad de rodaje –algo posible por lo bien engrasado de todo el engranaje-, ya que con 40 páginas de guión diarios grabados y 1’2 episodios por día, avanza a una velocidad cuatro veces mayor que una serie al uso. “Está todo tan organizado, que alguien podría pensar que esto es fácil, pero nos esforzamos para que cada capítulo posea los estándares de calidad que buscamos desde el primer capítulo”.

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Trabajar como en un teatro

Raúl Peña, el célebre don Carmelo Leal de la serie se refirió a que “tenemos que estudiar una media de 40 páginas de modo casi diario”. Se refirió también a que el ritmo del rodaje los obliga a levantarse diariamente a las 6 de la mañana, y aseguró que las tomas sólo se repiten entre dos y tres veces, lo que equivale a hacerlo casi en directo, “es casi como estar en un teatro”, dijo.

Por su parte, Chico García (don Severo Santacruz), dijo que, “pese a rodarse en un polígono industrial, al abrir una puerta se ve todo un universo, es como una enorme casa de muñecas en la que todo está reproducido fielmente, ahí está todo lo que vemos en televisión”.

El coloquio posterior fue muy animado, con un público entusiasta  de la serie queriendo saber todos los detalles: desde cuando morirá tal o cual personaje, hasta dónde compró Raúl Peña las alzas que llevó a su primera prueba, pasando por el motivo del título (“una serie en la que todos los personajes tienen un secreto, todos tienen algo que esconden”).

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Un organismo vivo

Pablo Guerrero aseguró que “la serie es un organismo vivo y, como tal, evoluciona por sí misma”, y contestó a una persona del público que pedía la estabilidad de la pareja principal: “Cuando una pareja que se persigue logra la felicidad, la relación deja de interesar, la felicidad no vende”, “cuando llegue la felicidad para todos, la serie morirá”, dijo.

Raúl Peña definió perfectamente lo que ha logrado la serie y que se pudo ver en el interés con el que preguntaban las personas del público: “Nos hemos convertido en el pueblo de España, lo cual es lo más bonito que nos podría haber ocurrido”.

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