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El cambio climático y la insensibilidad de los países del primer mundo

Presentación del libro “Justicia ecológica en la era del Antropoceno”,

Hoy martes 18 de octubre, a las 10 horas, se ha celebrado en el Hemiciclo de la Facultad de Letras la presentación del libro “Justicia ecológica en la era del Antropoceno”, en edición de Teresa Vicente Jiménez, profesora de Filosofía del Derecho de la Universidad de Murcia.

En el acto, que ha estado presidido por el Rector José Orihuela, han participado, además de la propia editora, Carlos Berzosa, Francisco López Bermúdez y Pedro Costa Morata, coautores del libro.

La publicación aborda el nuevo paradigma de la justicia ecológica como un modelo jurídico, pero a la vez físico, económico, político y ético. La creciente intervención humana en los sistemas naturales nos ha introducido en una nueva era geológica: el Antropoceno. Entre las alteraciones producidas por los humanos en el planeta destacan el calentamiento global y el cambio climático. El calentamiento del sistema climático es una de las más graves amenazas para la humanidad. La alteración de los equilibrios medioambientales entre el hombre y la naturaleza mantenidos durante milenios supone riesgos como la inseguridad alimentaria.

La editora del libro ha afirmado en la presentación que “Hasta ahora el derecho ha prescindido de la realidad mediambiental, pero si alteramos ésta, la humanidad estará en peligro”. Dijo que “Para seguir avanzando como humanidad tenemos que cuidar el medio ambiente”, y que “como ciudadanos del siglo XXI no sólo tenemos derechos sociales, también derechos ecológicos”.

Por su parte, Pedro Costa Morata, profesor de la Universidad Complutense, aludió a que Europa aportó el antropocentrismo, “según el cual, los humanos somos los reyes de la naturaleza”, y el etnocentrismo, que dice que “Europa es el centro”. Costa Morata se refirió a que América fue considerado un mundo con seres inferiores que no tenían derechos, y de ahí que se produjeran, sucesivamente tres fenómenos execrables: “genocidio, esclavitud y saqueo de recursos”.

Costa Morata acabó su discurso afirmando que “El mundo es mucho más que la cultura occidental. Cuando se dice que todos somos culpables de la degradación del planeta, hay que decir que no en la misma medida, cada uno tiene una responsabilidad distinta”.

Por su  parte, el profesor de la UMU Francisco López Bermúdez, principal auspiciador de que el libro llevara en su título el término “Antropoceno”, se quejó del poder destructor de la actividad del hombre actual: “El ser humano –dijo- produce hoy más sedimentos que todos los procesos naturales juntos”, y aludió al gran número de especies que están desapareciendo “estamos en la sexta extinción”, dijo.

Afirmó que son precisamente “los que menos están abusando del planeta lo que más están sufriendo el cambio climático”, y eso está exacerbando las diferencias entre países ricos y pobres”. Dijo que “El cambio climático está unido al modelo depredador económico actual” y que “los países desarrollados son insensibles a estos problemas causados por el cambio climático”.

Carlos Berzosa se quejó de que “la naturaleza está cambiando por el fetichismo del crecimiento en el que nos hemos instalado”. Añadió que la economía, al igual que la política, se está olvidando de los grandes problemas del mundo, como el cambio climático y afirmó que “no hay que dejarse obnubilar por el consumismo pensando que es el fin último.

Cerró  el turno de intervenciones el Rector Orihuela, que afirmó que “El cambio climático es hoy una realidad, y hay que poner el interés para que el conocimiento nos lleve a su solución”. “Somos culpables –añadió finalmente- tenemos que concienciarnos y luchar por el cambio”.